La República Argentina pondrá en órbita este miércoles 30 de septiembre su segundo satélite geostacionario, Arsat-2, desde la plataforma de lanzamiento del Centro Espacial de Kourou, en la Guyana Francesa.
Diseñado y construido en el país suramericano, una vez operativo favorecerá la exportación de contenidos audiovisuales, potenciará los servicios en telecomunicaciones en países vecinos y, además, fortalece la soberanía tecnológica de la Patria Grande.
La agencia de noticias nacional de Argentina adelantó que el lanzamiento está previsto a partir de las 4:00 de la tarde, hora venezolana (17:30 en Argentina y 20:30 GMT). Mientras que el Arsat-1 -lanzado en octubre de 2014- posee una antena única en banda Ku y centra su emisión en el territorio argentino, el Arsat-2 tiene tres antenas, dos desplegables y una fija, que emiten en dos bandas de frecuencia, Ku y C. “Arsat-2 tendrá una cobertura en Suramérica y otra en Norteamérica, ambas en la banda KU.
En tanto, la banda C cubrirá el continente entero. Esto le permitirá aumentar la capacidad de transferencia y distribuir en los mercados hispanoparlantes contenidos producidos por la industria cinematográfica y televisiva en castellano”, explicó el jefe del Programa de los Satélites de Comunicaciones de la estatal Invap, Ignacio Grossi. Asimismo, destacó que este satélite de comunicaciones estará sincronizado con el movimiento de la Tierra, logro que mejorará la cobertura de Internet y telefonía IP en sitios aislados. El Arsat-2 se construyó en la ciudad de Bariloche, por encargo de la estatal Arsat, con una inversión de al menos 250 millones de dólares. Tras el exitoso lanzamiento de Arsat-1, la nación suramericana disfruta de servicios de Internet en zonas remotas, a las que no llega cobertura terrestre, como por ejemplo fibra óptica. Igualmente, ha permitido actualmente unas dos mil 500 escuelas rurales están conectadas y ya poseen el servicio de banda ancha. Argentina se unirá a Venezuela como uno de los países de la Región con dos satélites.
En 2008, el Gobierno Bolivariano lanzó al espacio el primer satélite artificial venezolano, Simón Bolívar o Venesat-1, y luego en 2012 se puso en órbita el Francisco de Miranda o VRSS-1, este último de observación remota. Además, actualmente trabaja en la construcción del tercer satélite, Antonio José de Sucre o VRSS-2, como parte de los convenios firmados por el presidente Nicolás Maduro con la República Popular China, para potenciar las telecomunicaciones y seguir consolidando la soberanía ultraterrestre.
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