El concepto de “salud digital” toma cada vez más fuerza en Latinoamérica y se convierte en un potencial nuevo mercado, pero su desarrollo requiere de más inversiones en innovación tecnológica y de la eficiencia de los Gobiernos, apuntaron especialistas del sector.
Sensores y dispositivos inalámbricos, cámaras, tecnología en tercera dimensión (3D) y procesamiento masivo de datos son algunas de las herramientas utilizadas en el área de la salud y que, además de ofrecer soluciones y ayudar en los tratamientos médicos, pueden convertirse en un mercado de oportunidades en la región.
El empresario Guilherme Emrich, presidente de la compañía brasileña de biotecnología y producción de insulina Biomm, comentó a Efe que en materia de innovación en salud en la región existe una interdependencia de las alianzas público privadas.
En el caso específico de Brasil, Emrich señaló que la innovación en salud depende también mucho de los investigadores que están concentrados en las universidades y no tanto en las industrias, lo que limita la “agilidad” en sus avances.
La industria de medicamentos genéricos, apuntó Emrich, también frenó en parte el desarrollo de nuevas fórmulas y descubrimientos en la región.
Emrich participó el martes en el FT Latin America Healthcare and Life Sciences Summit, que se celebró en Miami promovido por el diario británico Financial Times y la multinacional Deloitte, con especialistas, empresarios y representantes de los Gobiernos para debatir sobre las nuevas propuestas tecnológicas del mercado.
“Las nuevas tecnologías son esenciales para mantener el desarrollo sostenible, recibir los nuevos desafíos y cambios”, destacó en su intervención el viceministro de Salud de Colombia, Fernando Ruiz, quien reconoció que “las inversiones han crecido”, pero deben ser más “efectivas” en materia de innovación.
Ruiz defendió también la regulación y control de precios de la industria.
Representantes de México, Brasil, Chile, Costa Rica, Argentina y Colombia presentaron también los avances y retos de la salud en materia de tecnología.
Para Sylvia Lin, directora de Desarrollo del conglomerado francés Sanofi, uno de los líderes mundiales de la industria farmacéutica, el respaldo de los Gobiernos para la innovación es “necesario” en la medida que torna a los mercados más “eficientes” y facilita el acceso a las nuevas tecnologías.
La falta de educación y la diseminación sin control de informaciones sobre salud en las redes sociales fue otro de los problemas expuestos en el foro, como indicó a Efe Leonardo Florêncio, unos de los expertos brasileños en el tema de desarrollo de bancos de datos sobre salud digital.
Para Javier Garza, de la mexicana Clínicas de Azúcar, el uso de esos bancos de datos en la región permitirá descubrir más a tiempo enfermedades graves y facilitar así su tratamiento.
Durante el evento, más de la mitad de los participantes consideró que la situación política y económica regional puede incidir en los cambios de las políticas de salud.
Otros factores de incidencia citados, tanto positiva como negativamente, fueron la inoperancia, la falta de incentivos, las expectativas y la salud digital, esta última con 16% entre los participantes del encuentro.
En ese sentido, la farmacéutica alemana Merck apuesta en el mercado latinoamericano, principalmente Brasil, México y Chile, con el desarrollo de medicamentos biológicos, consumo de vitaminas, minerales, probióticos y orgánicos.
“Con un crecimiento de la demanda a lo largo de los años en América Latina, la digitalización ayuda a consolidar el sector farmacéutico de la región” y aproximan esa industria con las personas, afirmó la directora ejecutiva de Consumer Healthcare de Merck, Uta Kemmerich-Keil.
Fuente: EFE