Aunque parezca increíble, existen ciertas razones -tanto internas como externas- por las cuales tu piel se vuelve cada vez más grasosa. Estas son los tres más importantes:
La comida
No solo la comida saturada y la comida chatarra provocan que la piel se vuelva grasosa, también existen algunos alimentos habituales -como los productos refinados- que son igualmente dañinos para nuestro cutis.
Esto se da porque contienen hormonas que hacen que nuestra piel sea más propensa a volverse grasosa.
Las hormonas
Las hormonas que se producen en el periodo menstrual pueden ser la causa de la oleosidad en nuestra piel y de los granitos, principalmente en el rostro.
Los genes
La genética influye mucho en el organismo de toda mujer. En muchos casos, cuando las mujeres tienen tendencias a piel grasa, sus glándulas tienden a producir una mayor cantidad de componentes grasos que son desechados a través de la piel. EME