"Me pegaron con un palo, me pisatearon con las botas del ejército y me dieron rodillazos", dijo Feras Killani, uno de los reporteros árabes de la BBC liberado.
(El agresor) "encontró un tubo de plástico en el suelo y me pegó, entonces, uno de los soldados le dio un palo largo", agregó Killani, un refugiado palestino, quien aseguró que "sabía quiénes éramos y qué estábamos haciendo".
Killani y sus colegas, el británico Chris Cobb-Smith y el turco Goktay Koraltan, fueron detenidos el lunes y trasladados a unos barracones donde "sufrieron repetidas agresiones".
Liliane Landor, del departamento de noticias mundiales de la cadena pública británica, aseguró que la "BBC condena firmemente este trato abusivo de nuestros periodistas y exhorta al gobierno libio a que garantice que todos los medios de comunicción puedan trabajar libremente".
"Pese a estos ataques, la BBC seguirá cubriendo los acontecimientos en Libia para nuestra audiencia tanto dentro como fuera del país", aseguró.
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