El gobernador de Mérida, Marcos Díaz Orellana, informó que la situación en su estado es delicada por las precipitaciones y que en las últimas 24 horas unas 300 personas más han quedado en la calle. El mandatario local indicó que 25 parroquias del estado se encuentran incomunicadas.
Advirtió el gobernador que la vía del páramo podría estar bloqueada y eso pone en riesgo la producción agrícola. Además, recordó que Mérida está incomunicada por el Sur del Lago.
Informó que los pueblos del sur también están muy afectados por las lluvias.
Díaz Orellana aseguró que su gobernación está en capacidad de atender la contingencia, se ha desplegado maquinaria y ha habido colaboración de otros organismos. También dijo que dispone de dos helicópteros que por el momento no pueden despegar debido a las condiciones climáticas.
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