La Laguna Blanca del páramo de Mariño está en riesgo de colapso debido a las intensas lluvias que han rebosado su nivel, advirtió el gobernador del estado Mérida, Marcos Díaz Orelllana.
“(La laguna) está extremadamente llena y pudiésemos tener un riesgo de colapso de la misma”, dijo Díaz Orellana, tras realizar una supervisión aérea por la cuenca del río Mocotíes, en el municipio Tovar, al oeste de la capital andina.
Tal afirmación la hace el jefe del gobierno en momentos cuando persisten las lluvias en diversas zonas de este estado de los Andes venezolanos, afectadas principalmente por el deterioro de la vialidad hasta el punto de restringir el tránsito vehicular en algunos sectores.
Hasta las primeras horas de la tarde del sábado se mantenían los trabajos de intervención con máquinas en esa cuenca afluente del Río Chama, aseguró Díaz Orellana, quien resaltó que “en horas de la noche de ayer, aun cuando había un fuerte deslizamiento de rocas y piedras, pudimos dar paso, abriendo o reaperturando por un sólo canal”.
En cuanto a la vía que conduce a El Vigía (capital del municipio Alberto Adriani, al noroeste del estado, dijo: “Tenemos paso y, como se ha venido trabajando, las máquinas continúan en el sitio”, dijo el gobernante merideño quien pese a un derrumbe, “se pudo despejar y restablecer, de manera parcial, el tráfico en esta importante vía.”
En el páramo, la otra ruta de ingreso al estado Mérida, se presentó “un deslizamiento en las zonas que se corresponden a las vecindades de Timotes (municipio Miranda, noreste), donde está severamente afectada la vía, por lo que le pedimos a las personas tomar las previsiones del caso.”
Con respecto a la vía que conecta al estado con Barinas, Díaz Orellana aseguró que ésta “se encuentra totalmente despejada, para conocimiento de las personas quienes decidan viajar hacia la región de Los Llanos altos o centrales” de Venezuela.
“(La laguna) está extremadamente llena y pudiésemos tener un riesgo de colapso de la misma”, dijo Díaz Orellana, tras realizar una supervisión aérea por la cuenca del río Mocotíes, en el municipio Tovar, al oeste de la capital andina.
Tal afirmación la hace el jefe del gobierno en momentos cuando persisten las lluvias en diversas zonas de este estado de los Andes venezolanos, afectadas principalmente por el deterioro de la vialidad hasta el punto de restringir el tránsito vehicular en algunos sectores.
Hasta las primeras horas de la tarde del sábado se mantenían los trabajos de intervención con máquinas en esa cuenca afluente del Río Chama, aseguró Díaz Orellana, quien resaltó que “en horas de la noche de ayer, aun cuando había un fuerte deslizamiento de rocas y piedras, pudimos dar paso, abriendo o reaperturando por un sólo canal”.
En cuanto a la vía que conduce a El Vigía (capital del municipio Alberto Adriani, al noroeste del estado, dijo: “Tenemos paso y, como se ha venido trabajando, las máquinas continúan en el sitio”, dijo el gobernante merideño quien pese a un derrumbe, “se pudo despejar y restablecer, de manera parcial, el tráfico en esta importante vía.”
En el páramo, la otra ruta de ingreso al estado Mérida, se presentó “un deslizamiento en las zonas que se corresponden a las vecindades de Timotes (municipio Miranda, noreste), donde está severamente afectada la vía, por lo que le pedimos a las personas tomar las previsiones del caso.”
Con respecto a la vía que conecta al estado con Barinas, Díaz Orellana aseguró que ésta “se encuentra totalmente despejada, para conocimiento de las personas quienes decidan viajar hacia la región de Los Llanos altos o centrales” de Venezuela.
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