Un grupo de turistas admiraba un glaciar en el fiordo de Tracy Arm, en Alaska, a bordo de una embarcación cuando de repente una pared de hielo se desprendió dándoles un buen susto.
Los turistas, ajenos al peligro, grababan desde la cubierta del barco la pared de hielo del glaciar cuando ésta se desplomó.
Una pasajera corrió de inmediato y cayó al piso del bote, rompiéndose una pierna, reportó el diario The Sun, mientras que la embarcación empezó a acelerar para escapar del oleaje.