EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama, dedicó hoy unos minutos a
visitar el Salón del Automóvil de Washington para sentarse al volante de
los nuevos modelos híbridos y eléctricos de los fabricantes del motor
estadounidense.
Obama sorprendió a los asistentes del salón del motor y atendió las
explicaciones de los responsables de General Motors (GM), Ford y Dodge
sobre las novedades en bajo consumo, coches compactos y motores eléctricos.
Después de tomar los mandos de varios vehículos, entre ellos un colorido
Chevrolet Camaro decorado con la bandera de EE UU y motivos patrióticos, el
presidente indicó que esos coches son una muestra “de que el motor
estadounidense está de vuelta”.
Obama también dejo caer un mensaje velado al aspirante republicano Mitt
Romney sin mencionarlo directamente al indicar que “algunos estuvieron
dispuestos a dejar que esta industria muriera”.