¿Qué pensamos cuando hablamos de petróleo? Sin duda se nos vienen a la cabeza palabras claves como Venezuela, reserva, gasolina, dólares, OPEP. Lo último que podríamos pensar es en productos o tratamientos de belleza, y cuando pensamos en los derivados del petróleo, nunca imaginamos que algunos de ellos podrían servir para cuidar nuestro cuerpo.
El petróleo es un hidrocarburo que se origina por la descomposición de la materia orgánica depositada en grandes cantidades en el fondo del mar o en el suelo. Es un recurso natural no renovable y es la actual fuente de energía del mundo. El oro negro, como se le conoce, se refina y se trata mediante distintos procesos para obtener derivados como: la gasolina, el propano, lubricantes, asfalto, entre otros. Uno de estos derivados es la parafina, compuesta por hidrocarburos, es utilizada comúnmente en construcción, como aislante eléctrico, en la fabricación de termostatos y es el ingrediente principal en la realización de velas. Más allá de estas funciones, la parafina también tiene increíbles beneficios a nivel cosmético. Humecta la piel a profundidad y además tiene propiedades reductoras. La pérdida de agua en la dermis, por diversos factores, es una de las principales causas de la piel quebrada y seca. La aplicación de parafina permite que la humedad y el agua no se evaporen de la piel, pues ésta crea una capa dura que hace que se mantenga y se adentre en las capas de la piel. Combinado con calor o frío puede resultar beneficioso para cualquier parte del cuerpo
UN DERIVADO, MÚLTIPLES USOS
Uno de los usos comunes de la parafina es en manos y pies. En el caso de las manos otorga suavidad y en el caso de los pies elimina la resequedad. En el centro de estética Hands Care Center son especialistas en un tratamiento con parafina muy sencillo, pero efectivo. Luego de haber exfoliado y limpiado el área, se coloca la parafina como una especie de guante, varias capas para lograr la consistencia adecuada. Se envuelven las manos con papel Envoplast y se les coloca un guante térmico para concentrar el calor. La parafina se deja actuar entre 15 y 20 minutos y los resultados se notan inmediatamente. El tratamiento con parafina funciona porque estando caliente hace que la humedad de la piel suba a las capas superiores, pero como se endurece y es impermeable, esa humedad no puede salir con lo que vuelve a la piel hidratando cada nivel de ella con mayor profundidad cada vez. Este tratamiento también se puede aplicar en codos y rodillas para combatir las asperezas que allí se forman.
La parafina también se puede utilizar como mascarilla facial para hidratar a profundidad el rostro. El tratamiento o procedimiento se recomienda que sea realizado por un experto. En el centro La Clemencia Medical Spa ofrecen el tratamiento de nutrición facial con parafina que comienza con un mini facial para limpiar el cutis, luego una exfoliación para quitar las impurezas y se cierra con la mascarilla de parafina que se coloca por unos 20 minutos. Para este tratamiento se utiliza una parafina especial, más suave y menos abrasiva, pues la piel del rostro es muy delicada. Al finalizar el tratamiento se puede notar un refrescamiento y una suavidad en el cutis.
La parafina puede ser utilizada también como aislante térmico para inducir la sudoración y reducir medidas. El objetivo es conseguir un efecto parecido al de un sauna, que comprimirá el tejido celular subcutáneo debido a la pérdida de líquidos y a la eliminación de toxinas. Puede ser utilizado en los tratamientos reafirmantes y reductores pues la combinación de calor y frío, que se realizan en estos tratamientos, hace a la parafina un perfecto ingrediente.
La parafina es uno de los ingredientes básicos para la mayoría de las cremas hidratantes, y reafirmantes, pues sus propiedades resultan beneficiosas para el cuidado de la piel. También se utiliza en los labiales ya que ayuda a dar mayor duración al aplicarlos y de esta manera mantener hidratados los labios.
HASTA PARA LOS NIÑOS
Otro derivado del petróleo, importante para la estética y la belleza, es el aceite mineral que sirve como base en cremas y lociones para el cuerpo y el cutis. Su propiedad hidratante se centra en que, al ser aplicado en la piel, crea una barrera que bloquea la pérdida de agua y permite que la piel se mantenga fresca e hidratada. El aceite mineral es básico para los aceites de bebé y productos para niños. Uno de los trucos caseros conocidos es utilizar aceite de bebé después del baño para darle suavidad e hidratar la piel. Por supuesto, el aceite utilizado para productos cosméticos es ultra refinado y es tratado para que sea apto para el uso en personas y en la piel, delicadas o no.
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