La naturaleza nos sigue sorprendiendo. Una tortuga de cinco años de edad se ha convertido en una atracción del Museo de Historia de la Ciencia en Kiev, la capital de Ucrania.
Su particularidad: además de tener dos cabezas (bicéfalo), tiene dos corazones y seis patas, pero un solo intestino.
Lo curioso es que las cabezas no se ubican juntas, sino en sentido opuesto, lo que permite a este reptil tener un control de su desplazamiento, sea de avance o retroceso.
Otro detalle de este extraño animal es que su dura corteza tiene la forma de un corazón
AFP
