Un grupo ciudadano ha denunciado la presencia de altos niveles de radiación en algunos puntos de más de 20 escuelas de la ciudad de Koriyama, a 60 kilómetros de la accidentada central nuclear de Fukushima, informó la agencia Kyodo.
El grupo ha hecho pública la existencia de los llamados "hot spots" ("puntos calientes") tras obtener documentos de la junta educativa municipal en los que consta que, recientemente, se han detectado altas concentraciones de radiación en al menos 14 colegios de primaria, siete de secundaria y cinco guarderías de la ciudad.
En algunos puntos concretos de estos espacios la dosis anual de radiación acumulada podría alcanzar los 20 milisievert, muy por encima del límite anual de 1 milisievert recomendado por la Comisión Internacional de Protección Radiológica.
Todos los colegios de Koriyama enviaron el pasado abril documentos con resultados de mediciones a la junta educativa después de que ésta les ordenó calcular los niveles de radiación en el aire en torno a cunetas, setos y sumideros de sus instalaciones.
La propia junta levantó el mes pasado una restricción que impedía que los estudiantes jugaran en los patios escolares durante más de tres horas diarias a raíz del accidente de marzo de 2011 en la central nuclear de Fukushima Daiichi.
Aunque los niveles de radiación en patios y aulas de los colegios de Koriyama se miden con regularidad para certificar que son seguros para los menores, una portavoz del grupo ciudadano ha pedido que se restablezca la restricción dada la existencia de tantos "hot spots".
El accidente en la central de Fukushima, el peor desde el de Chernóbil en 1986, ha supuesto que las escuelas de la provincia donde se sitúa la planta hayan tenido que llevar a cabo planes especiales de limpieza para evitar que sus estudiantes se vean expuestos a altas concentraciones de radiación.
Esto ha supuesto que muchos centros hayan retirado de sus patios capas de tierra de varios centímetros de espesor, donde podía haberse depositado material contaminado, antes de recubrir de nuevo la superficie con arena limpia.
Más de un año después de la catástrofe en Fukushima, cerca de 80.000 personas que residían en un radio de 20 kilómetros alrededor de la planta nuclear siguen evacuadas a causa de la elevada radiactividad.
EFE