En una nueva señal de debilidad del mercado inmobiliario estadounidense, la construcción de casas nuevas bajó en julio, notificó este jueves el Departamento de Comercio.
El retroceso fue de 1,1 por ciento en el séptimo mes del año en uno de los apartados más golpeados desde el inicio de la crisis financiera mundial en 2007.
Sobre el tema, la Asociación de Banqueros Hipotecarios informó que la caída de la demanda por quinta ocasión consecutiva golpeó la semana pasada las solicitudes hipotecarias para comprar casas en la nación norteña.
El indicador retrocedió 4,5 por ciento debido a un menor pedido de préstamos para adquisición de viviendas y refinanciamiento.
El sondeo cubre más del 75 por ciento de los requerimientos de hipotecas residenciales de Estados Unidos.
Expertos opinaron que la ayuda en ese mercado es un tema pendiente para el gobierno.
Por ello consideran necesario un programa de rescate del nivel inmobiliario a fin de respaldar a los propietarios que continúan atrasados en los pagos de sus hipotecas a causa del estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008.
(PL)
