Su sonrisa y un robo hicieron famosa a La Mona Lisa
(PARÍS dpa) – La gente forma largas filas para poder verla. Y eso que no se trata de una cantante famosa, de una supermodelo ni de la última estrella de Hollywood.La mujer de cabellera oscura de la que hablamos ni siquiera se mueve. Pero sonríe a todos los que la miran.
Nos referimos al cuadro más célebre del mundo: la Mona Lisa, pintada por el italiano Leonardo da Vinci hace unos 500 años. Se supone que comenzó a trabaja en la obra en 1503.
La mayoría de los expertos coincide en que se trata de un retrato de Lisa del Giocondo. Por eso se la llama también La Gioconda. Era la mujer de un comerciante, que habría encargado el cuadro a Leonardo da Vinci. Pero el pintor no se lo llegó a entregar, se lo quedó hasta casi el final de su vida. La compró entonces el rey de Francia Francisco I. Hoy esta famosa obra está colgada en el Museo del Louvre, en París, la capital de Francia.
Hay varios motivos por los que esta pintura alcanzó tal fama mundial. Algunos sostienen que tiene que ver con la sonrisa de la Mona Lisa. Esa sonrisa parece encantadora, pero a la vez muestra cierta frialdad.
Mucha gente comenzó a inventar historias secretas para explicar el cuadro. Que la Mona Lisa estaba enferma. O que no se trata de una mujer, sino de un hombre. Incluso, quepodría ser un autorretrato del mismo Leonardo da Vinci.También tiene importancia la mirada. Parece dirigirse a la distancia con ensoñación, pero a la vez da la sensación de estar mirando directamente a los ojos de quien la está observando. El público se asombra también de la técnica con que pintó Leonardo el cuadro, con un efecto un tanto vaporoso. Se tiene la impresión de que hay algo extraño en la pintura. ¿Pero qué es?
La mayoría de estos supuestos misterios son fantasía. Pero existe una historia real que sí le agregó un aire de misterio a la pintura: en 1911 fue robada y permaneció desaparecida durante dos años, hasta que se logró capturar al ladrón. Éste resultó ser un carpintero italiano, que cometió el robo por encargo de un estafador argentino. Un tercer cómplice, un experto falsificador de arte, hizo seis copias casi perfectas del cuadro, las cuales fueron vendidas a seis millonarios que pensaban que estaban comprando el original robado. Así los ladrones multiplicaron el valor que podían obtener del robo. Pero no compartieron este botín con el pobre carpintero, que seguía teniendo el cuadro original. Trató de venderlo por su cuenta, pero cayó en manos de la policía.
Y la Mona Lisa volvió así al Museo del Louvre, más famosa todavía que antes. Incluso durante su ausencia se habían acercado miles de curiosos al museo: para ver el espacio vació que había quedado en la pared.
¿Cómo se cuida a la Mona Lisa del deterioro por el tiempo y otros daños que pueda sufrir?
La Mona Lisa fue robada y recuperada. Sufrió daños. Pasó por muchas peripecias. Frank Zöllner, profesor de historia del arte en la universidad alemana de Leipzig, nos cuenta más detalles.
¿Cómo se cuida a la Mona Lisa del deterioro por el tiempo y otros daños que pueda sufrir?
Frank Zöllner: «Desde que fue robada en 1911 recibe protección especial: está colgada en una especie de caja climatizada detrás de un vidrio blindado. Después del robo hubo dos atentados con los que se pretendía destruirla. En uno de ellos sufrió daños por el ácido lanzado contra ella. En otra ocasión un hombre lanzó una piedra contra el cuadro. Además, la pintura se descuelga cada dos años para someterla a un examen completo y ver si el lienzo se ha deteriorado por el paso del tiempo.»
¿Y cuánto vale la Mona Lisa?
Frank Zöllner: «La pintura pertenece al Estado francés, no se puede comprar porque no está a la venta, como sucede con casi todos los cuadros que se exhiben en los museos públicos. Por eso es muy difícil ponerle un precio, sería algo ficticio.»