El dicho popular que asegura que los hijos siempre llegan con un pan debajo del brazo no puede aplicarse a todos los casos. A veces los hijos llegan tarde, y exigiendo derechos que pueden suponer muchos dolores de cabeza para los padres.
El pasado 30 de noviembre, y con la esperanza de evitar un largo proceso judicial, Carlos Baute accedió a reconocer a José Daniel Arellán, el hijo que tuvo a los 15 años con una joven de 13.
Varios años atrás, Baute había llegado a un acuerdo con su hijo, en el que le garantizaba una ayuda económica a cambio de que el joven no utilizara su apellido, no acudiese a programas del televisión ni se dedicara al mundo artístico. Sin embargo, José Daniel prefirió luchar por ser reconocido.
Padre e hijo se hallaban inmersos en el proceso judicial, cuando poco antes de salir la sentencia Baute decidió admitir la paternidad del joven y paralizar el proceso. José Daniel sintió que se le acababa de cumplir un sueño.
Hasta el momento, el cantante no ha querido hacer declaraciones sobre el tema, y ha continuado cumpliendo con sus compromisos familiares y profesionales.
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