El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, recibió hoy tanto ataques como apoyos tras firmar 23 órdenes ejecutivas para el control de armas en el país, acciones que no tendrán que pasar por el Congreso para entrar en vigor.
Tras el tiroteo ocurrido el mes pasado en Newtown (Conneticut), que dejó 28 víctimas, entre ellas 20 niños, el debate sobre la tenencia de armas se reabrió en el país, aunque esta vez con más virulencia debido al impacto causado tras la muerte de tantos menores.
Precisamente la alcaldesa de Newtown, Patricia Llodra, salió hoy en defensa de las medidas anunciadas por el presidente para endurecer el control de armas, que dijo son "de sentido común" y para las que pidió un apoyo ciudadano que permita que este sea "el momento del cambio" en EE.UU.
"Debemos abandonar esta especie de liturgia en la que hemos caído, según la cual no podemos hacer nunca nada porque no existe esa voluntad. Sólo la voluntad de la gente hará que esto cambie", aseguró la alcaldesa, que presenció hoy el anuncio de Obama en la Casa Blanca.
Por su parte, el alcalde de Filadelfia y presidente de la Conferencia de Alcaldes de EE.UU., Michael Nutter, agradeció el "compromiso" demostrado por Obama al firmar 23 órdenes ejecutivas que permiten que se tomen acciones "ahora" y no se pospongan las decisiones como había venido sucediendo.
Además, el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, agradeció al presidente que haya tomado la iniciativa en este asunto y mostró su compromiso para continuar trabajando en la Cámara Alta para promover una legislación que ayude a evitar la violencia armada en las calles de Estados Unidos.
"La tragedia en Sandy Hook fue el último y triste recordatorio de que no estamos haciendo lo suficiente para proteger a nuestros ciudadanos, especialmente a los niños, de la violencia armada y de una cultura de violencia. Todas las opciones deben estar sobre la mesa", insistió Reid.
Mientras tanto, el líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, John Boehner, no atacó al presidente sobre sus propuestas, aunque su portavoz, Michael Steel, dejó entrever que el asunto no es una prioridad para los legisladores republicanos.
"Los Comités de la Cámara revisarán estas recomendaciones", dijo Steel en un comunicado, "y si el Senado aprueba un proyecto de ley, también le echaremos un vistazo".
El senador republicano Marco Rubio rechazó hoy las medidas tomadas por Obama y dijo que "revertir los derechos de los ciudadanos" no es la respuesta ante tragedias como la ocurrida en Newtown.
"Nada de lo que el presidente está proponiendo habría detenido la masacre en Sandy Hook. El presidente Obama va contra los derechos de los ciudadanos que deben ser respetados y que protege la Segunda Enmienda en lugar de abordar seriamente las verdaderas causas subyacentes de la violencia", dijo Rubio en un comunicado después de que Obama firmara las 23 órdenes ejecutivas.
Rubio insistió en que "la frustración" de Obama ante la oposición republicana "no le da licencia para ignorar la Constitución" y subrayó la idea de que "las armas no son el problema" sino "los criminales con el mal en sus corazones y las personas con enfermedades mentales que son propensas a la violencia".
"En lugar de medidas radicales que hacen que sea más difícil para aquellos ciudadanos responsables y respetuosos con la ley adquirir armas de fuego, debemos centrarnos en las causas profundas de la violencia armada y mantener las armas fuera de las manos de los delincuentes y los enfermos mentales", agregó.
Obama firmó hoy 23 decretos para endurecer el control de las armas que no necesitan el visto bueno del Congreso y que se dividen en cuatro categorías: evitar que las armas lleguen a manos inadecuadas, prohibir la venta de las armas de asalto, aumentar la seguridad en las escuelas y mejorar los servicios de salud mental.
EFE