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viernes, 30 de mayo de 2014

Maduro se pronuncia tras la denuncia de magnicidio: “Es apenas la punta del iceberg”

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo hoy que debe funcionar una justicia “completa” ante los supuestos planes de magnicidio y golpe de Estado que fue fueron denunciados el miércoles por el chavismo en el que involucran a opositores venezolanos y a un diplomático estadounidense.
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“A mí me preguntan que si debe funcionar la justicia. Completa, justicia completa (…) y nadie venga del mundo a presionar a Venezuela porque hagamos justicia, pero esto hay que castigarlo, tantas conspiraciones, intentos de golpes de Estado, de magnicidio, comprobados ya”, dijo durante una reunión con su Gabinete.
 
El presidente señaló que las denuncias que hicieron el miércoles dirigentes del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) son “apenas la punta del iceberg”, una muestra de la “perversidad” del “complot” que hay contra su Gobierno.
 
“Hemos venido neutralizando y controlando distintos factores de violencia que decidieron desatarse contra el gobierno que presido (…). Ellos quisieran eliminarme físicamente y destruirme moralmente”, aseguró.
 
La dirección del Psuv denunció el miércoles un plan de “magnicidio” y “golpe de Estado” contra Maduro
 
Maduro aplaudió, además, que el alcalde del municipio caraqueño de Libertador, Jorge Rodríguez, que el miércoles hizo la denuncia del supuesto plan, haya solicitado “respetuosamente” al Gobierno de Estados Unidos que sean aclarados los puntos en los que se han visto involucrados en la organización del magnicidio y golpe.
 
“Ya basta de conspiraciones contra la paz de los venezolanos, ya basta de planes de golpes de Estado, ya basta de planes de magnicidio, ya basta de tanto vendepatria y ese ya basta significa justicia ya, justicia justa”, dijo.
 
“Cada 11 tiene su 13″, indicó al explicar que el pueblo no permitirá un cambio de gobierno por la vía violenta, pero adujo que se ha propuesto que “no haya más nunca” un suceso violento similar al de abril de 2002, que sacó al chavismo del poder por algunas horas. 
 
La dirección del Partido Socialista (Psuv, chavista) denunció el miércoles un plan de “magnicidio” y “golpe de Estado” contra Maduro, en el que involucró, entre otras personas, a la exdiputada opositora María Corina Machado y el embajador de EE UU en Colombia, Kevin Whitaker.
 
Asimismo, el Departamento de Estado de EE UU rechazó categóricamente las acusaciones de haber participado en una presunta trama para ayudar a Machado y a otros opositores a trazar planes contra el Gobierno de Maduro.
 
“Esas acusaciones son totalmente falsas e infundadas”, contestó la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, en referencia a las acusaciones del Gobierno de Venezuela de que Whitaker ayuda a Machado a orquestar un golpe de Estado.
 
El presidente Maduro ha denunciado durante su primer año de gobierno unos cinco planes de magnicidio y más de una decena de actos de sabotaje y complot. La oposición ha desestimado esas denuncias asegurando que forman parte de una estrategia del chavismo para distraer la atención de los venezolanos de los problemas graves que padece el país.