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lunes, 29 de diciembre de 2014

El primer ministro francés se opone al independentismo en Cataluña

(Cataluña, 29 de diciembre. AFP).- El primer ministro francés, Manuel Valls, nacido en Barcelona, se pronunció en una entrevista publicada este lunes contra la división de los Estados europeos por el nacionalismo surgido en algunas regiones como Cataluña, en el noroeste de España.
“Las naciones de Europa no tienen que dividirse más, no tienen que perder fuerza”, respondió Valls a una pregunta sobre la posible separación de Cataluña del resto de España en una entrevista con el periódico español El Mundo, que lo escogió como el hombre del año.
¿Qué es Europa? Es una federación de Estados-nación. No es una federación de nacionalidades”, dijo el primer ministro, nacido en Barcelona, la principal ciudad catalana, donde todavía vive parte de su familia.
“En un mundo muy abierto, es casi natural que la gente vaya buscando su propia identidad, pero si las identidades dividen a los Estados, a las grandes naciones que han construido Europa durante estos últimos 30 a 40 años, y España lo ha hecho, finalmente acaban debilitando a Europa”, añadió.
Cataluña, una de las regiones más ricas de España y con un amplio nivel de autogobierno, vivió en los últimos años un aumento del sentimiento independentista, alimentado por la crisis económica y la deterioración de las relaciones con el gobierno conservador español.
Hasta el momento, todos los dirigentes europeos que se pronunciaron sobre la cuestión se opusieron a la independencia en Cataluña al igual que el gobierno central de Madrid, que bloqueó las aspiraciones del ejecutivo regional de celebrar un referéndum en la región.
Además de Cataluña, otras regiones del continente experimentan un auge del nacionalismo como el País Vasco, también en España, Flandes en Bélgica o Escocia, que el 18 de septiembre rechazó independizarse del Reino Unido en un referéndum.
El “no” escocés supuso un alivio en el seno de la Unión Europea, según cuyos dirigentes la secesión de una parte de un Estado miembro supondría su salida de la unión, algo inédito hasta el momento.