La Comisión de investigación de la ONU sobre Eritrea solicitó este miércoles a la comunidad internacional que no ignore durante más tiempo la represión y violación sistemática de derechos humanos a la que están sometidos los eritreos.
En un informe ante Consejo de Derechos Humanos de la ONU, la Comisión denunció que en el último año unas 400.000 personas se han visto obligados a abandonar el país.
El presidente del grupo de investigadores dijo al presentar el estudio que “en lugar de ser un país basado en la ley y el orden, Eritrea es un país definido por la represión y el miedo”.
Agregó que desde la independencia, el poder ha permanecido en manos de una persona y de un partido que gobiernan con arbitrariedad e impunidad.
El documento de casi 500 páginas, hace un recuento de enormes, amplias y sistemáticas violaciones de los derechos humanos y caracteriza al sistema judicial como "totalmente corrupto".
La comisión también considera que las violaciones en el área de ejecuciones extrajudiciales, tortura y trabajos forzados podrían constituir crímenes contra la humanidad, explicó Smith.
CUT. 'Tenemos fuertes sospechas de que hay crímenes contra la humanidad, esto es, crímenes que se han cometido directamente y bajo las órdenes del gobierno", señaló.