El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, llamó el martes a un “diálogo social” para crear un sistema de combate a la corrupción y la impunidad con apoyo internacional y superar la crisis que han provocado las marchas de los “indignados”.
En cadena de radio y televisión, el mandatario convocó a los diferentes sectores a “un diálogo social sin condiciones”.
Añadió que en el diálogo se integraría el “Sistema Integral Hondureño de Combate a la Impunidad y la Corrupción” para “afrontar con responsabilidad y valentía los cambios que nadie se ha atrevido a realizar”.
Con el llamado, Hernández busca superar la crisis política generada por multitudinarias marchas promovidas por los “indignados por la corrupción”.
Las manifestaciones, que se iniciaron hace un mes en la capital y se fueron extendiendo a decenas de ciudades, exigen la renuncia del presidente, acusado de múltiples escándalos, entre ellos el vaciamiento del Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), del que desaparecieron unos 300 millones de dólares.
Hernández admitió haber recibido informes de que unos 94.000 dólares del dinero sacado del IHSS fueron a dar a la campaña que lo llevó al poder, pero sostiene que ese desvío se comprobó luego que él nombrara una comisión investigadora.
El mandatario pareció dar una respuesta también a loa cuatro jóvenes indignados que iniciaron una huelga de hambre, para exigir la integración de una comisión contra la impunidad con apoyo de Naciones Unidas, como la que ha venido funcionando en Guatemala, para que investigue la corrupción en el Seguro Social y otras instituciones.
El presidente dijo en su alocución que en 2010 y 2011 su gobierno hizo esa solicitud a la ONU, pero que lka organización internacional respondió con una oferta de apoyo técnico al Ministerio Público.
“Decisiones serias”
“Nuestra propuesta es más profunda, amplia e incluyente que otras que se han presentado”, aseguró.
Según la propuesta, el “Sistema Integral Hondureño de Combate a la Impunidad y la Corrupción” crearía una “unidad de supervisión y apoyo al Ministerio Público contra la corrupción y la impunidad, la cual estaría integrada por fiscales hondureños e internacionales”.
También se crearía una “unidad de supervisión y apoyo” a los tribunales en el combate a la corrupción, integrada por jueces hondureños e internacionales y otra unidad especial para proteger a los jueces y sus familias.
A la vez, se conformaría un “observatorio del sistema de justicia” con académicos y miembros de la sociedad civil para someter a una “evaluación permanente” al sistema de justicia y un “sistema de integridad empresarial regido por principios de transparencia e integridad”.
Así se lograría “enfrentar de manera constructiva y democrática los retos que tenemos como nación” porque “es la hora de tomar decisiones serias”, subrayó el gobernante, acusado por la oposición de pretender quedarse en el poder a pesar de que la constitución prohíbe la reelección presidencial.
Hernández señaló que la oposición en su contra viene de sectores que se han sentido afectados por el combate contra el crimen organizado, y de otros que están cansados de tanta corrupción.
Reconoció que para echar a caminar sus propuestas, Honduras “necesita del apoyo de nuestros amigos la comunidad internacional, de los países que han demostrado su profunda solidaridad con el pueblo de Honduras y los organismos regionales e internacionales”.AFP
