América Latina después de 1999 no volvió a ser la misma. La piel aletargada del continente despertó de una vez y para siempre bajo la batuta y la mirada de Hugo Chávez, el hombre que los grandes líderes del mundo recordarán como el último gran integrador de la región, quien se dispuso a consolidar el sueño que una vez tuvo el Libertador Simón Bolívar.
Ese hombre con temple de acero, mirada penetrante y carisma avasallante marcó, desde el momento que se sumió en la vida militar y política del país, la historia de Venezuela al igual que los territorios más allá de estas fronteras.
Una aproximación al “Arañero de Sabaneta”
Hugo Rafael Chávez Frías nació en Sabaneta, estado Barinas, el 28 de julio de 1954. Hijo de Hugo de los Reyes Chávez y Elena Frías, es el segundo de seis hermanos.
La precaria situación económica por la que atravesaba la familia Chávez Frías, les obligó a tomar medidas en la crianza de sus hijos. La abuela paterna Rosa Inés, crió a Hugo y a Adán.
Realizó los estudios primarios y secundarios en su ciudad natal, mientras que los superiores los desarrollo en la Academia Militar de Venezuela, donde obtuvo el grado de subteniente en 1975.
También fue Licenciado en Ciencias y Artes Militares, rama Ingeniería, mención Terrestre.
El 17 de diciembre de 1982, siendo ya militar y bajo la sombra del Samán de Güere, funda el Movimiento Bolivariano Revolucionario, MBR-200. Es coautor del Proyecto de Gobierno de Transición para el 4 de febrero de 1991 y autor del Anteproyecto Nacional Simón Bolívar.
En 1992 es comandante de la operación militar “Ezequiel Zamora”, rebelión militar del 4 de febrero. Fracasó este intento e hizo un llamado a través de los medios de comunicación a los militares que formaron parte de la rebelión y dijo: “Lamentablemente, por ahora, los objetivos que nos planteamos no fueron logrados en la ciudad capital”, invitándolos a deponer las armas.
Esta acción la justificó alegando el descontento de la gran parte de la población frente a las medidas macroeconómicas implementadas por el Gobierno de Carlos Andrés Pérez e inspiradas en recomendaciones del Fondo Monetario Internacional.
Chávez fue encarcelado al día siguiente. Pasó dos años en la prisión de Yare esperando juicio,siendo liberado tras la amnistía que le otorgó Rafael Caldera. Es allí en este momento que la carrera a la presidencia toma una forma consistente, tangible y más viva que nunca.
Chávez, el presidente cuyo verbo quedó tatuado en los venezolanos
Con números aplastantes Chávez gana las elecciones presidenciales en 1999. Bajo las banderas de la Revolución Bolivariana y el Socialismo del Siglo XXI con su mandato sometió a Venezuela a profundos cambios en todos los ámbitos sumando querencias y aversiones.
Luego de la reforma constitucional y de ser ratificado como mandatario nacional en el año 2000, el poder de Hugo Chávez se solidifica y su partido conquista la mayoría absoluta en las elecciones parlamentarias.
En el año 2001 le fue concedida una Ley Habilitante que le da poderes especiales al Presidente marcando el camino de un poderío que tendría consecuencias políticas en Venezuela, pues para ese momento la oposición ya empezaba a criticar severamente varias medidas del Gobierno nacional.
En las elecciones presidenciales del año 2006 es reelecto como mandatario nacional. Obtiene 62,89%, mientras que su principal contendor, Manuel Rosales, alcanzó 36,85% de los votos escrutados.
La arista social, el plato fuerte de la revolución
Entre los logros que se le atribuyeron a Chávez durante su gestión estuvo la reducción de los niveles de pobreza. Fue reconocido en el mundo entero por sus programas sociales desde 2003 llamados “Misiones”.
En materia de educación la “Misión Robinson”, “Misión Ribas” y “Misión Sucre”; el programa médico – asistencial “Misión Barrio Adentro 1 y 2”; la capacitación integral “Misión Vuelvan Caras” y alimentaria “Mercal”.
Cada uno de estos proyectos tuvo continuidad a lo largo de su mandato y fueron el centro de las elecciones de 2012.
Las “Grandes Misiones” fueron la segunda o tercera parte de cada uno de los programas que con éxito lograban que Chávez fuese reelecto en cada proceso electoral al que se lanzaba.Concentraba la idea en su persona, pero delegaba cada uno de ellos a uno de sus hombres y mujeres de co
La última y más polémica misión fue “A Toda Vida Venezuela”, una que pretendía luchar contra la inseguridad creciente que azotaba al país, siendo el punto de crítica de diversos sectores.nfianza.
La batalla que Chávez peleó hasta el último momento: el cáncer
En junio del 2011, el mandatario informó que tenía cáncer y que se trasladaría de inmediato a La Habana, Cuba, para ser intervenido de urgencia. Fue operado en cuatro oportunidades.
En la segunda operación se le extrajo un tumor cancerígeno del tamaño de “una pelota de béisbol”. Luego, se sometió a varias sesiones de quimioterapia, en su mayoría en Cuba.
En octubre de 2011, se declaró sano del cáncer, por primera vez.
En febrero del 2012, Chávez anunció una recaída en la misma zona del primer tumor extirpado. Tras la operación le siguieron, al menos, cinco ciclos de radioterapias en Cuba.
El sábado 8 de diciembre de ese mismo año, en horas de la noche cuando en una Cadena Nacional, anunciaría que sería cometido a una nueva intervención.
Su última intervención duró seis horas y consternó al mundo entero. Tras su muerte, el país lo lloró en cada una de las Plazas Bolívar de las diferentes regiones.
Sin embargo, las enseñanzas y anécdotas que dejó en su paso por el poder sirvieron para avivar en cada uno de sus seguidores esa necesidad de tener presente el recuerdo de aquel soldado hecho pensamiento forjador de una América Latina libre: Hugo Chávez.