El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha dado hoy por acabado el proceso de paz iniciado en 2013 con la guerrilla kurda y ha confiado en que la OTAN tome las decisiones apropiadas para apoyar a su país.
Erdogan acusó a la guerrilla del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) de haberse “aprovechado” del plan de paz y aseguró que su país seguirá atacando sus posiciones en el norte de Irak.
“No es posible mantener el proceso de paz con quienes amenazan la unidad nacional y la hermandad”, dijo en una rueda de prensa antes de iniciar un viaje oficial de dos días a China, donde se reunirá con el primer ministro, Xi Jinping. EFE