La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó este martes de la muerte de 49 migrantes en el Canal de Sicilia el sábado pasado, cuando viajaban en una embarcación pesquera que llevaba a unas 300 personas.
Los sobrevivientes fueron rescatados por un barco de la Armada Italiana a unos 40 kilómetros de las costas libias.
Los marinos italianos encontraron los 49 cuerpos en la bodega de carga de la embarcación, que estaba parcialmente inundada con agua y combustible.
Los migrantes murieron asfixiados con los gases del motor de la nave. La mayoría provenía del África Subsahariana, Bangladesh y Pakistán.
La tragedia se suma a la lista de catástrofes en el Mediterráneo que sólo en las últimas dos semanas han dejado 350 migrantes muertos y han elevado la cifra de decesos en la travesía a 2.350 en lo que va del año.
El director general de la OIM afirmó que los casos como este no pueden catalogarse como simples incidentes sino que son crímenes cometidos por los traficantes sin escrúpulos.
