El metro de Londres volvió hoy a la normalidad después de que la segunda huelga del suburbano durante este verano, que tuvo lugar ayer, provocara una jornada de caos en el transporte, cuyas redes de tren y autobús se vieron superadas por la aglomeración de pasajeros.
El miércoles a las 17:30 GMT los trabajadores del metro de la capital británica iniciaron un paro para protestar por sus condiciones laborales ante el establecimiento de un servicio nocturno.
Esta es la segunda huelga en un mes acordada por los cuatro sindicatos que agrupan a los trabajadores del suburbano, después de la que se organizó los pasados 8 y 9 de julio.
Los sindicatos están descontentos con las condiciones ofrecidas a los conductores que operarán en el servicio nocturno, que funcionará los viernes y sábados a partir del 12 de septiembre en cinco líneas de la red (Jubilee, Victoria, Central, Norther y Piccadilly).
Las negociaciones entre los trabajadores y la dirección se reanudarán la próxima semana.
Según la BBC, los sindicatos han rechazado la última oferta, que incluía un aumento del 2 % del salario, un pago extra de 200 libras (283 euros) por cada turno nocturno a los conductores y un bono de 500 libras (710 euros) a los trabajadores de la red cuando dé comienzo el servicio.
El alcalde de Londres, el conservador Boris Johnson, que ha reiterado que no prevé cambiar sus planes para implantar el servicio nocturno, ha acusado a los sindicados de “poner una pistola en la cabeza de los londinenses”.
Johnson dijo que no está “preocupado” y que puede aplazar su apertura “siempre y cuando ésta tenga lugar en otoño”.
Fuente: EFE