Según una investigación de científicos de la Universidad Estatal de Carolina del Norte (Estados Unidos), hablar de sexo con los padres, especialmente con las madres, promueve un comportamiento sexual más seguro entre adolescentes.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores, liderados por la doctora Laura Widman, analizaron información sobre el tema proveniente de más de 52 estudios realizados en los últimos 30 años a más de 25 000 adolescentes.
Los resultados, publicados en 'JAMA Pediatrics', revelaron que la comunicación entre padres e hijos sobre temas de sexualidad promueve una conducta sexual más segura y responsable entre los adolescentes. Lo que sería especialmente positivo entre las chicas.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores, liderados por la doctora Laura Widman, analizaron información sobre el tema proveniente de más de 52 estudios realizados en los últimos 30 años a más de 25 000 adolescentes.
Los resultados, publicados en 'JAMA Pediatrics', revelaron que la comunicación entre padres e hijos sobre temas de sexualidad promueve una conducta sexual más segura y responsable entre los adolescentes. Lo que sería especialmente positivo entre las chicas.
"La asociación entre comunicación con los padres y la utilización de métodos contraceptivos en adolescentes sería mucho más frecuente en mujeres que en hombres; así como la del condón sería más importante entre chicas que chicos", afirma Widman.
No obstante, si bien la comunicación entre padres e hijos es un factor que podría redundar en una conducta sexual más segura entre jóvenes, tal comunicación no siempre ocurre por vergüenza o desconocimiento, señalan.
"Los resultados de este estudio confirman que la comunicación entre padres y adolescentes es un factor de protección para la juventud y sirve para justificar futuras intervenciones", destaca el informe final.
No obstante, si bien la comunicación entre padres e hijos es un factor que podría redundar en una conducta sexual más segura entre jóvenes, tal comunicación no siempre ocurre por vergüenza o desconocimiento, señalan.
"Los resultados de este estudio confirman que la comunicación entre padres y adolescentes es un factor de protección para la juventud y sirve para justificar futuras intervenciones", destaca el informe final.