Los pacientes con gastritis crónica tienen a la sangre de grado como un aliado natural para combatir esta enfermedad. Esta planta, que crece de forma tanto silvestre como cultivada, es un excelente desinflamante es especial para el tratamiento de las úlceras estomacales.
Desde épocas muy remotas se utiliza el líquido rojizo que exuda la corteza del árbol de sangre de drago cuando es cortada. Sus usos son múltiples, pero tal vez el más conocido es el de cicatrizar rápidamente las heridas.
"Uno se pregunta por qué la sangre de grado es tan efectiva. En estudios realizados se ha encontrado que este látex estimula la contracción de la herida, ayuda en la formación de la costra y regenera rápidamente la piel ayudando a la formación de colágeno. A esta acción contribuyen la taspina y los polifenoles que contiene, y se ha demostrado que el látex total es más activo que sus componentes aislados", comentó la doctora Martha Villar, especialista en Medicina Complementaria de EsSalud.
La especialista dijo que se puede utilizar en úlceras crónicas, en heridas agudas, en procesos inflamatorios de la mucosa oral, entre otros.
Pero no sólo sirve para la cicatrización de heridas externas, sino que además ayuda a cicatrizar úlceras en la mucosa del estómago o del duodeno, al incrementar el espesor y la consistencia del mocus que lo cubre.
También, tiene un efecto antiinflamatorio tan potente como el naproxeno, y un efecto antiviral y antimicrobiano, entre las bacterias que son inhibidas por este látex está el "H. pylori", bacteria a la que se le atribuye constantemente la persistencia de las gastritis crónica.
Así, la sangre de grado es una buena opción para curar las gastritis, los cuales deben ser tomadas por no menos de dos meses seguidos a 10 gotas diluidas en 100cc de agua tibia en ayunas y dos horas después de los alimentos todos los días.