( AVN).- El diputado a la Asamblea Nacional (AN) por el bloque de la patria Earle Herrera destacó este domingo que el odio de la derecha hacia el libertador Simón Bolívar es de vieja data.
“Es viejo, no es nuevo, ese odio hacia el Libertador, desde los mantuanos que lo consideraban un traidor y todos aquellos que realmente fueron blanco de la gesta bolivariana”, expresó en su programa Kiosko Veraz, que transmite Venezolana de Televisión.
Herrera recordó que cuando Bolívar murió, 17 de diciembre de 1830, en Santa Marta, Colombia, la burguesía venezolana se declaró en júbilo.
También rememoró que en 2002, cuando la derecha le dio el golpe de Estado al presidente Hugo Chávez, la primera medida de Pedro Carmona, luego de su autoproclamación como presidente de facto, fue retirar los cuadros de Bolívar del Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores, en Caracas.
“En el año 2002, cuando se dio la carmonada y se derroca por 48 horas al comandante Hugo Rafael Chávez Frías, la primera acción de Pedro Carmona Estanga y de quienes lo acompañaban, entre ellos toda esta dirigencia que ahora está en la Asamblea Nacional, fue retirar el retrato de Simón Bolívar del Salón Ayacucho del Palacio de Miraflores”, detalló Herrera.
El parlamentario revolucionario refirió que la más reciente agresión hacia la memoria de Bolívar se dio el pasado miércoles, cuando el presidente de la Asamblea Nacional, Henry Ramos Allup, ordenó sacar los cuadros del Libertador y del comandante Hugo Chávez del Palacio Federal Legislativo, en la ciudad capital.
“Vemos sacando los retratos del Libertador de los palacios de gobiernos, en este caso del Palacio Legislativo. Son historias recurrentes de una derecha que parece que no aprende”, añadió Herrera.
La acción de agravio de Ramos Allup contra Bolívar y Chávez fue rechazada por el Gobierno Nacional y el pueblo venezolano, y desde entonces se realizan jornadas culturales en las calles del país para honrar al Libertador y su labor al frente de las luchas independentistas de hace 200 años, que dieron como resultado la libertad de Venezuela del yugo español y también la independencia de Colombia, Bolivia, Ecuador, Perú y Panamá.
Los retratos del Libertador y de Chávez rechazados por la derecha venezolana también se exhiben en las calles de la ciudad de Caracas como un acto de homenaje
