La Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos expresó este viernes una gran preocupación por el deterioro de la salud del periodista palestino Mohammed Al-Qiq, quien se encuentra en huelga de hambre en Israel para protestar por su detención administrativa.
La portavoz del Alto Comisionado, Cécile Pouilly, indicó en una conferencia de prensa en Ginebra que el periodista ha denunciado malos tratos desde su arresto el pasado 21 de noviembre y llamó a las autoridades israelíes a investigar esas afirmaciones.
"Al-Qiq ha estado en huelga de hambre más de 70 días y se encuentra en un estado muy grave. Sus doctores le han informado sobre posibles daños de salud irreversibles", subrayó Poully.
Agregó que la Corte Suprema israelí decidió suspender la detención administrativa de Al-Qiq hasta que se recupere y pueda salir del hospital, cuando podría volver a ser detenido bajo el argumento de que supone una amenaza a la seguridad.
La Oficina del Alto Comisionado llamó nuevamente a las autoridades israelíes a poner fin a las detenciones administrativas y a liberar o someter a juicio inmediatamente a todas las personas afectadas
