La comisión rectora del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, el fondo público para sanear el sector financiero acordó este viernes enviar a la Fiscalía Anticorrupción diez operaciones de las antiguas Bancaja y Caja Madrid. El FROB calcula que los perjuicios económicos ocasionados por dichas operaciones ascienden a unos 1.503 millones. El organismo público ha especificado que estas operaciones corresponden a 2010, antes de la fusión para crear Bankia.
“La operativa analizada en dichos expedientes se basa en operaciones de financiación y refinanciación para la adquisición de inmuebles o participaciones en sociedades, que han dado lugar a importantes pérdidas para las entidades y presentan indicios de irregularidad operativa o no responden a una finalidad económica lógica”, añade el FROB. El FROB no baja la guardia en la búsqueda paciente de asuntos turbios y muy costosos para los contribuyentes. El último hallazgo es el mayor atribuido a las cajas que compusieron Bankia. La comisión rectora del FROB analizó este viernes los informes forensic (de investigación) recibidos, y decidió el envío a la Fiscalía Anticorrupción de diez operaciones, todas anteriores a 2010, correspondientes a las antiguas Bancaja y Caja Madrid. “Según los informes, se estima que los perjuicios económicos ocasionados ascienden a unos 1.503 millones”, dice la nota.
Esta es una delicada manera de describir oscuras operaciones de dos tipos: las cajas compraban sociedades a un altísimo precio (muchas veces irreal), y los beneficiarios de la operación eran los accionistas de esas sociedades, relacionados con directivos de las cajas. En otros casos, se procedía a la refinanciación de operaciones inmobiliarias que debían haberse considerado fallidas, con lo que se evitaba ejecutar los activos. Al final, pasaba el tiempo y la pérdida para la caja se disparaba.
Desde la nacionalización de las cajas, el FROB ha enviado a la Fiscalía unas 53 operaciones sospechosas. De ellas, 18 están ya bajo investigación judicial. Esta es la actuación más abultada de las cajas de Bankia, pero también se han enviado operaciones de Catalunya Banc y Novagalicia por 3.000 millones, y otras de Caja Granada, Sa Nostra, Caixa Penedés, con 175 millones de quebranto. Son operaciones que supuestamente beneficiaron a unos pocos y perjudicaron a los contribuyentes que han financiado el rescate de las antiguas cajas.EP