Estados Unidos dio un nuevo paso hacia el pleno empleo, al registrar en febrero 242.000 nuevos ocupados. El ritmo de contratación se considera sólido. Sin embargo, no está dicho que sea suficiente como para forzar a la Reserva Federal a subir tipos de interés en el próximo encuentro que concluirá el 16 de marzo, porque no refleja presión del lado de la inflación. El paro se mantuvo el mes pasado en el 4,9%, el nivel más bajo en ocho años.
El consenso de mercado anticipaba la creación de 195.000 empleos en febrero, lo que representaba una mejor frente a los 151.000 que se dieron en la primera lectura para enero. El aumento de la contratación del primer mes de 2016 se eleva ahora a 172.000 ocupados mientras que diciembre sube a 271.000 empleos, una revisión al alza en ambos casos de 30.000 ocupados. El índice de desempleo ya se colocó por debajo del 5% el pasado enero, por primera vez desde febrero de 2008.
Las grandes empresas, como mostró el dato de empleo privado publicado el miércoles, están generando empleo a un ritmo mayor del esperado pese a la tensión en los mercados financieros por la debilidad económica internacional y la fortaleza del dólar. Pero los indicadores publicados muestran una vulnerabilidad. El sector minero y de la energía perdió 19.000 empleos el mes pasado, porque el desplome de precios les está forzando a conservar liquidez.
La próxima reunión de la Reserva Federal se celebra en menos de dos semanas. Incluye rueda de prensa al término de la presidenta Janet Yellen. El indicador de empleo no muestra un efecto en la economía derivado del alza de tipos decidida en diciembre. Las ventas de coches en febrero, por ejemplo, fueron muy sólidas. Pero las opciones de un nuevo incremento en el precio del dinero son casi nulas.La tasa de participación laboral, entre tanto, subió al 62,9% y se colocó en el nivel más alto desde mayo de 2015. Eso explica que el paro quedara estable por segundo mes consecutivo, porque hay más gente que vuelve al mercado laboral. Si se tienen en cuenta los seis millones de ocupados a tiempo parcial y los 1,8 millones que no busca trabajo de forma activa, el subempleo es del 9,7%.
Normalización monetaria
Es por este motivo que se puso especial atención en el dato de empleo de febrero y enero, por lo que pueda decir de la marcha de la economía en un arranque de 2016 dominado por la volatilidad. Más que lo que se pueda decidir en esta reunión de la Fed, el horizonte está en junio. En diciembre pasado la idea era la de realizar cuatro subidas de un alza de puntos en los tipos. Los mercados ven dos como mucho este año si lo permite la inflación.
EE UU registró 230.000 nuevos ocupados de media en 2015, en el segundo mejor año desde 1999. Es complicado que se mantenga este ritmo en una situación próxima al pleno empleo. Yellen ya ha dicho, de hecho, que 100.000 empleos mensuales son suficientes para la Fed. Lo que se espera ahora es que al haber una mayor competencia por los trabajadores, las empresas procedan a elevar los salarios. Es una tendencia que empezó en octubre.
En febrero lo hicieron a un ritmo anual del 2,2%. Eso podría crear un reto al proceso de normalización monetaria, pese a que en el mes cayera una décima. La economía avanza a un ritmo moderado. El temor de Wall Street es que los sueldos lo hagan a partir de ahora más rápido con la contratación y la actividad económica, una combinación en sentidos opuestos que podría forzar a la Fed a darse después más prisa en el alza de tipos si se genera inflación con más intensidad de la esperada.EP