REGIONALES:

Sociedad civil de Tinaquillo marchó para exigir justicia y seguridad

Familiares y amigos de las cinco personas asesinadas el fin de semana en una licorería del sector Juan Ignacio Méndez, así como vecinos y miembros de la sociedad civil se lanzaron la mañana de ayer a las calles de Tinaquillo, para exigir justicia ante este hecho abominable y reclamar a los cuerpos del estado, mayor seguridad.

Con pancartas en manos y lanzando proclamas de indignación por el quíntuple homicidio, los manifestantes pidieron a los cuerpos policiales dar con los responsables y aplicarles todo el peso de la ley.

Acompañando el entierro de cuatro de las víctimas del tiroteo, los dolientes recorrieron la avenida Miranda hasta la Plaza Bolívar, donde luego de la bendición sacerdotal, prosiguió la marcha y protesta que inclusive tocó las puertas de la Alcaldía.

Los vecinos visiblemente enardecidos exigieron al alcalde Carlos Añez dar la cara, así como solicitaron la destitución del Director Regional de Seguridad y del resto de los organismos policiales del estado que operan en el municipio.

Erika Gil esposa de Freddy Guerra, una de las víctimas del tiroteo, que deja cinco niños huérfanos, pidió justicia para que la muerte de su esposo no quede impune. “Queremos justicia, porque eran personas trabajadoras y padres de familias, no eran ningunos delincuentes”, dijo.

De igual forma, vecinos del sector La Trinidad de Juan Ignacio Méndez, reclamaron mayor seguridad para el popular sector, donde aseguraron que la delincuencia se encuentra desbordada por la falta de patrullaje policial. “Pedimos justicia y más justicia, ahora matan a las personas como a perros, los policías se esconden y cuando acaba todo el tiroteo es que llegan a recoger los muertos” reclamó Julio Mujica.

Los moradores aseguraron que situaciones similares con bandas delictivas que operan en la zona ocurren a diario en dicho sector, donde no se ha puesto en marcha acciones orientadas a combatir el hampa, achacándole la negligencia al gobierno municipal, regional y los cuerpos de seguridad, los cuales a su juicio, no han hecho nada para detener esta ola de violencia que enluta cada vez, a más hogares tinaquilleros.