A pesar de la decisión de los galenos de ir a un paro médico nacional, las emergencias de los hospitales públicos están abiertas para la población y su personal se encuentra atento ante cualquier caso.
En el Área Metropolitana de Caracas y el interior del país los galenos se abstuvieron de pasar consultas y sólo se limitaron a tratar casos críticos.
Douglas León Natera, presidente de la Federación Medica Venezolana, informó que en todo el país se cumplió la protesta 90%.
Señaló que están obligados a exigir que las condiciones hospitalarias se ejerzan con dignidad; “además los métodos de lucha están establecidos en nuestra reglamentación”.
Estados como Zulia, Carabobo, Mérida y Aragua son sólo algunos en los que los galenos se apostaron en las entradas de sus lugares de trabajo.
Por su parte, el viceministro de Redes Hospitalarias, José España, calificó de “oportunista” el paro de médicos, aclarando que no discutirán las peticiones con el presidente de la FMV por carecer de “autoridad moral”.
Situación en la Región Capital
En el Hospital de Coche Doctor Leopoldo Manrique Terrero se encontraba una madre con su hijo de 8 años.
Lloraba al salir del área de cura, debía esperar varias horas para que a su pequeño le realizaran una sutura de cuatro puntos en la cabeza, el único médico de guardia realizaba una cirugía.
Tibisay Masera acompañaba a la joven madre. Ellas habían llegado del colegio Chalboud ubicado en Coche, lugar donde los chicos hicieron sus travesuras.
“La situación en los hospitales está crítica“, contestó Masera al preguntar cuál es su impresión con la situación hospitalaria.
Finalmente, una enfermera le limpió con alcohol la herida del niño para despejar los restos de sangre que se habían adherido al cuero cabelludo, luego colocó una gasa con un adhesivo a su cabeza.
Cerca del lugar, un grupo de médicos que se encontraban en el área de traumatología, manifestaron que “el material quirúrgico está viejito, se tienen que hacer milagros. Las pinzas que son para precisión deben ser apretadas fuertemente para poder trancarlas”.
Los yesos que llegan a traumatología “son contados” y cuando se acaban no podemos hacer nada por los pacientes, dijeron.
En el Hospital Clínico Universitario la directiva “ha sido respetuosa con la protesta”.
Gabriel Sifontes, pediatra, declaró que en varias oportunidades han notificado a la directiva la falta de bombas de infusión, monitores, medicamentos, escasez de soluciones, material quirúrgico, engrapado, además de carros de paro.
Por Ana María López
Con información de Tal Cual