En la Bolsa Mercantil de Nueva York, el crudo estadounidense para octubre cerró con un alza de 1,02 dólares, o 1,21 por ciento, a 85,44 dólares por barril, con operaciones entre 83,40 y 86,39 dólares.
El crudo Brent para octubre escaló 95 centavos, o 0,88 por ciento, a 109,31 dólares en Nueva York.
El alza de las acciones estadounidenses ayudaron a impulsar al mercado petrolero.
El índice Standard & Poor’s 500 ganaba más de un 3 por ciento antes de un esperado discurso del presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, durante una reunión de bancos centrales el viernes en Jackson Hole, Wyoming.
Algunos inversores prevén que Bernanke opte por medidas adicionales de alivio monetario para estimular a la alicaída economía estadounidense.
“Esta es una escalada impulsada por las esperanzas de que Bernanke mencione algo sobre un estímulo económico”, dijo Bill O’Grady de Confluence Investment Management.
“En Libia, los rebeldes se encuentran en una guerra urbana y Gaddafi no ha caído, lo que eleva el riesgo de interrupciones petroleras y de un prolongado periodo antes de que se restablezca la producción”, agregó.
En el mayor productor petrolero de Africa, Nigeria, Royal Dutch Shell confirmó el martes que se vio obligada a interrumpir sus exportaciones de crudo Bonny Light para reparar los daños en un oleoducto provocados por ataques con sierras.
El petróleo escaló temprano, luego de que datos de manufactura en China y Alemania fueron mejores de lo que algunos economistas habían esperado.
Los datos ayudaron a impulsar al euro contra el dólar, que cayó un 0,2 por ciento contra una cesta de monedas extranjeras.
Los débiles datos de ventas de casas en Estados Unidos en julio no lograron frenar la escalada en el mercado de acciones, ya que algunos inversores interpretaron los datos como una justificación para que la Fed adopte más medidas de estímulo.
Los rebeldes libios tomaron control el martes del cuartel general de Muammar Gaddafi en Trípoli tras una feroz batalla con las fuerzas leales al Gobierno, pero el paradero del líder, quien prometió pelear “hasta el final”, seguía siendo un misterio.
Por Joshua Schneyer
(Reporte adicional de Robert Gibbons, Gene Ramos y Janet McGurty en Nueva York y Simon Falush en Londres)
Por Joshua Schneyer
(Reporte adicional de Robert Gibbons, Gene Ramos y Janet McGurty en Nueva York y Simon Falush en Londres)
