El supervisor del Dibise explicó que la ley impone una multa de 10 unidades tributarias para aquellos conductores que fallen la prueba de alcoholemia, además de la suspensión de la licencia de conducir. En los 18 terminales terrestres que hay a nivel nacional hay efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, del Instituto Nacional de Transporte Terrestre y de la Oficina Nacional Antidroga, según Villegas.
El funcionario señaló que se están haciendo también revisiones con detectores de metales para evitar el ingreso de armas a las unidades de transporte colectivo