Al menos 347 personas han muerto y 7,5 millones han resultado afectadas por las inundaciones en Pakistán, cuyas consecuencias han aumentado pese al despliegue de agencias de ayuda humanitaria, confirmó a Efe una fuente oficial.
La fuente se remitió al último cómputo de víctimas de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres (NDMA, siglas en inglés), en el que también se precisa que 638 han sido heridas a causa de las lluvias del monzón, que empezaron a finales de julio.
El epicentro de las inundaciones se sitúa en la agrícola provincia sureña de Sindh, donde la ONU ha desplegado sus agencias de ayuda humanitaria y ha pedido reunir 357 millones de dólares para socorrer a la población.
Las autoridades temen por la propagación de enfermedades como el cólera o la malaria a causa de las aguas estancadas en Sindh, 22 de cuyos 23 distritos están total o parcialmente anegados.
Pakistán sufrió en la estación monzónica de 2010 la peor catástrofe natural de su historia, con unas inundaciones que dejaron 20 millones de damnificados.
EFE