El Gobierno colombiano se pronunció sobre las versiones que daban cuenta sobre una supuesta desaparición de la excongresista liberal Piedad Córdoba.
A través de su cuenta de Twitter, el ministro del Interior, Germán Vargas Lleras, confirmó que “en efecto”, Piedad “se les voló a los escoltas en Mutatá (Antioquia) y se fue hacia Pavarandó con 2 periodistas de Telesur y un español”. A su juicio, esa decisión fue “una irresponsabilidad”.
En los últimos días, Piedad ha denunciado ser objeto de amenazas contra su vida y la de sus familiares.
Para Vargas Lleras, con acciones como la protagonizada por la ex congresista, “es muy difícil garantizar la seguridad de las personas que tienen un alto nivel de riesgo”. “Así, sí es muy berraco”, puntualizó.
Córdoba, entre tanto, respondió también a través de Twitter que “nunca” estuvo desaparecida.
“Estamos bien, no tenía señal de celular. Estábamos en la ruta hacia Mutatá que queda a siete horas de Apartadó”, escribió Córdoba y agregó; “Nunca estuve desaparecida, estuve sin señal mientras trabajábamos con comunidades afro e indígenas”.
Córdoba aseguró que avisó a la Policía de su viaje hacia Apartadó y Jiguamiandó.
Agregó que la ex senadora le dijo a los policías que informaría al esquema cuando regresara.
Pese a la advertencia, Córdoba y el grupo se subieron en un vehículo, tipo campero, que los llevó hasta Pavarandó, según conoció la Policía a través de las verificaciones de las unidades locales.Ya en esa población, la ex senadora y sus acompañantes tomaron una lancha río adentro.
El Gobierno aseguró que abandonó su escolta policial
La ex senadora Piedad Córdoba, a quien las Farc le han entregado en libertad a 20 secuestrados en los dos últimos años, abandonó una escolta policial en una zona del noroeste colombiano y se internó en una selvática región, informó el viernes la Policía.
La escolta de Córdoba, que iba junto a otras dos mujeres y dos hombres, acompañó a la ex congresista, una abogada de 56 años, desde la localidad de Chigorodó hasta Mutatá, ambas en el departamento de Córdoba y a unos 390 kilómetros al noroeste de Bogotá.
En Mutatá, Córdoba le dijo a los policías “que ella no requiere mas los servicios de protección policial, que continua sola con los acompañantes, cuatro personas, dos hombres y dos mujeres”, agregó Riaño a reporteros en el comando policial.
La ex congresista, añadió Riaño, dijo a los agentes que seguiría en lancha para internarse en una zona de la selva de aquella región. El oficial dijo desconocer la identidad de los acompañantes de Córdoba.
Luis Guillermo Pérez, abogado de la ex senadora, dijo en diálogo telefónico que aunque desconocía las razones por las cuales Córdoba dejó la escolta, la ex legisladora se encontraba bien, que había hablado con ella por teléfono y que estaba en la zona visitando a comunidades afrodescendientes.
Riaño dijo desconocer cuándo había regresado Córdoba al país, del que su abogado ha dicho que salió en agosto debido a amenazas contra su vida. La ex congresista asegura que los sectores que la amenazan son los que “reiteradamente han perseguido a la izquierda en este país”, aunque no ha dado detalles.
El jefe policial indicó que los agentes habían advertido a Córdoba que en la zona donde se encontraba hay presencia de distintos grupos ilegales armados, incluyendo las Farc, y de allí la preocupación policial.
El Ministerio del Interior ha dicho que en Colombia, Córdoba cuenta con un esquema permanente de seguridad con de auto blindado y al menos ocho guardaespaldas.
A inicios de año, Córdoba dijo que esperaba que antes de mediados del 2011 las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Farc le entregaran en distintos grupos a 16 policías y militares retenidos por la guerrilla, algunos de ellos desde hace 13 años.
Hasta ahora se espera que Córdoba haga algún anuncio sobre esas liberaciones.
Con información de El Tiempo y AP