dpa) – La guerrilla de las Farc rechazó hoy de nuevo el llamado del gobierno colombiano para la desmovilización de sus miembros después de que fuese abatido el máximo líder del grupo, alias “Alfonso Cano”, en una operación militar efectuada el 4 de noviembre.El grupo armado hizo el pronunciamiento en un texto publicado en Internet, el segundo que se conoce desde la muerte de “Cano”, catalogada por el gobierno como el golpe más importante que ha recibido la organización desde que se creó en 1964.
“Con el camarada ‘Alfonso’ recordamos a los ilusos: desmovilizarse es sinónimo de inercia, es entrega cobarde, es rendición y traición a la causa popular y al ideario revolucionario que cultivamos y luchamos por las transformaciones sociales, es una indignidad que lleva implícito un mensaje de desesperanza al pueblo que confía en nuestro compromiso y propuesta bolivariana”, señaló el grupo.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) también indicaron que el “desesperado afán por rendir” al grupo guerrillero corresponde al interés del presidente Juan Manuel Santos de “enriquecer todavía más a los más ricos y hundir aún más en la miseria a los más pobres”.
“La resistencia heroica de la insurgencia colombiana, al igual que la voz en alto del pueblo movilizado en la protesta, no pueden cesar con un falso llamado a la negociación y el consenso. Cualquier intento de desmovilizar la lucha popular sin la concertación de soluciones que erradiquen sus causas estará llamado al fracaso. No puede haber paz con represión y hambre”, añadió el mensaje.
Según las Farc, su objetivo es formar “un haz estratégico” mediante la “movilización de masas y la lucha guerrillera” para lograr la solución política al conflicto armado.
Santos, que comenzó a gobernar en agosto de 2010, ha expresado que no descarta un diálogo de paz con las Farc pero que todavía no ha llegado el momento para eso, pues el grupo armado no ha aceptado sus exigencias de cesar los ataques contra la población civil, cortar sus nexos con el narcotráfico y liberar a los secuestrados.
El gobierno apunta a lograr la desmovilización de los cerca de 9.000 miembros del grupo, según cálculos del Ejército.
Las Farc, que en septiembre el año pasado también perdieron en un bombardeo a su principal jefe militar, alias “Mono Jojoy”, no han anunciado el nombre del sucesor de “Cano”, cuyo nombre verdadero era Guillermo Sáenz y tenía 63 años.
Varios observadores han coincidido en afirmar que es posible que las Farc reemplacen a “Cano” con Luciano Marín (alias “Iván Márquez”), Rodrigo Londoño (“Timochenko”) o Milton Toncel (“Joaquín Gómez”), quienes forman parte del “secretariado” o cúpula de mando.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, ha afirmado que al gobierno no le parece relevante saber quién será el máximo líder del grupo porque la fuerza pública dirigirá sus esfuerzos contra el que ocupe esa posición, “sea quien sea”.
