AP) – Uruguay, Brasil con el Santos de Neymar, México y Chile,
entre otros, se abrazaron al éxito en un año nefasto en el fútbol para
una potencia del fútbol como Argentina, que terminó huérfana de títulos.
Ancho de felicidad, Uruguay ganó la Copa América y cerró el
2011 a la cabeza de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de
2014; Santos se quedó con la Libertadores y fue finalista del Mundial de Clubes;
México atrapó la Copa de Oro y la presea dorada panamericana en Guadalajara; y
Universidad de Chile se alzo con la Copa Sudamericana.
Mucho más poderoso de lo que parece, Uruguay volvió a quebrar el orden
jerárquico del continente que suelen marcar Brasil y Argentina, tal como lo hizo
en el Mundial de Sudáfrica cuando fue semifinalista y quedó por delante de sus
poderosos vecinos.
Argentina tuvo un camino tortuoso en todos los niveles de selecciones
o de clubes y ni siquiera pudo festejar con Lionel Messi, un
sobrenatural del fútbol que exhibe sus proezas en el Barcelona y que a los 24
años sigue arrasando con todos los premios internacionales.
Uruguay quedó así como el máximo ganador de la Copa América con 15 títulos,
uno más que Argentina, que para colmo de sus males se despidió en forma
prematura de ese campeonato en su propia casa cuando su victorioso vecino
rioplatense lo eliminó por penales en cuartos de final.
Por lo tanto, Argentina no estuvo ni siquiera en la lucha por el
tercer puesto, así como también impactó la ausencia de Brasil,
despachado en cuartos de final por Paraguay en los penales.
Para Brasil y Argentina, con cinco y dos copas mundiales, respectivamente,
una puja por el tercer puesto no hubiese sido ningún premio de consuelo.
Con tres puñaladas de Paolo Guerrero, Perú venció 4-1 a Venezuela y finalizó
tercero a expensas de una Vinotinto que por primera vez en la historia
fue semifinalista de la Copa América, el torneo más importante del
continente a nivel de selecciones.
Santos dio la vuelta olímpica en Sao Paulo ante un Peñarol
de Uruguay tan granítico como el seleccionado charrúa.
Tras un empate 0-0 en Montevideo, Neymar abrió el camino de la victoria 2-1
del Santos, cuyo otro gol lo convirtió Danilo, con lo cual el Peixe se consagró
campeón de la Libertadores por tercera vez, tal como lo había hecho en 1962/63
durante el reinado de Pelé.
Fue el tercer título seguido de Neymar tras haber ganado el campeonato
Paulista con el Santos y el Sudamericano Sub20 en Perú con la selección de
Brasil.
Pero por más que la mercadotecnia del fútbol quiera a Neymar en el
pedestal, flaco favor le hacen al compararlo con Pelé, Diego Maradona o el
propio Messi.
Este joven de cresta reluciente, por ahora quizás el mejor jugador de la
región, pasó casi desapercibido en la posterior Copa América y en la final del
Mundial de Clubes en Japón cuando Barcelona le propinó un descomunal baile con
un 4-0 al Santos, con dos goles de Messi.
Neymar, de todos modos, con apenas 19 años tiene tiempo y
talento para volar a una altura similar o superior a la de los grandes
futbolistas de la historia.
Sin Neymar, volcado de lleno a la selección mayor, Brasil se consagró campeón
del Mundial Sub20 en Colombia al vencer 3-2 a Portugal en la final, con tres
goles de Oscar y tras un alargue de media hora.
Fue el quinto título mundial de Brasil en esa categoría, con lo cual quedó a
uno de alcanzar a Argentina, que ni siquiera se clasificó a este campeonato.
México se quedó con el tercer lugar con una victoria 3-1
sobre Francia.
Exitoso año de México: aunque no le fue bien en la Copa América a la que
acudió plagada de suplentes o juveniles, el Tri refrendó el título de la Copa de
Oro al derrotar en la final 4-2 a Estados Unidos, en Pasadena, con dos goles de
Pablo Barrera y uno cada uno de Andrés Guardado y Giovani dos Santos. Estados
Unidos había sacado ventaja gracias a Michael Bradley y Landon Donovan.
Abrigado por millones de aficionados dentro o fuera de los
estadios, México además disfrutó en casa del campeonato Mundial Sub17
con una victoria 2-0 ante Uruguay en la final, con goles de Antonio Briseño y
Giovani Casillas.
Y por si esto fuese poco, los aztecas embolsaron la medalla de oro del fútbol
Panamericano cuando un gol de Jerónimo Amiones le permitió derrotar 1-0 a
Argentina en la final en Guadalajara.
Sobre el cierre del año, Universidad de Chile superó como local 3-0
(1-0 en choque de ida) a Liga de Quito de Ecuador y se proclamó campeón
de la Copa Sudamericana, que está un peldaño abajo de la Libertadores.
Dos goles de Eduardo Vargas, máximo artillero de la competición y flamante
jugador del Napoli italiano, y otro del argentino Gustavo Lorenzetti le
permitieron a la “U” adornar sus vitrinas con su primer trofeo
internacional.
El 2011 también será recordado como el año en que se retiró el
brasileño Ronaldo, uno de los mejores futbolistas de todos los tiempos
y principal anotador de los mundiales con 15 goles, uno más que el alemán Gerd
Müller.
Además, este año quedará marcado a fuego para River Plate de
Argentina y América de Cali de Colombia, dos de los principales clubes
del continente que descendieron a la segunda división en las ligas de sus países
por primera vez en la historia.