Federico Lombardi, portavoz del Vaticano, descartó un encuentro entre el Papa Benedicto XVI y el Presidente de la República, Hugo Chávez en Cuba.
“Fue una sorpresa. Acabo de enterarme ahora que va a estar en Cuba”, dijo el portavoz.
Lombardi declaró además que no está programado ninguna reunión entre Benedicto XVI y el caudillo venezolano, desmintiendo las informaciones desde medios oficiales venezolanos que daban por hecho que el Sumo Pontífice recibiría al bolivariano.
Cabe destacar, que la máxima autoridad de la Iglesia Católica, dijo que el comunismo ya no funciona en Cuba y que la Iglesia está dispuesta a ayudar a la isla a encontrar nuevas formas de avanzar en nuevos modelos.
“Hoy es evidente que la ideología marxista en la forma en que fue concebida ya no corresponde a la realidad“, expresó.
Recordemos que el Primer Mandatario Nacional viajó la noche del sábado a la ciudad de La Habana, para iniciar su tratamiento de radioterapia.
Religiosos y ateos atentos a la visita del Papa Benedicto XVI a Cuba
Desde los más fervientes católicos hasta los ateos recalcitrantes están atentos a la visita del Papa Benedicto XVI a Cuba, la segunda parada de su gira por Latinoamérica a uno de los últimos países que defiende la bandera del socialismo.
La llegada del Sumo Pontífice el lunes, procedente de México, está marcada por sus declaraciones a bordo del avión papal en las que aseguró que el comunismo ya no funciona y que la Iglesia Católica está lista para ayudar a buscar nuevas vías que permitan a la isla avanzar sin “traumas”.
Un gigantesco cartel presidido por un joven Fidel Castro, ataviado con su histórico uniforme verde oliva y fusil en mano, dará la bienvenida al Sumo Pontífice a Santiago de Cuba, ciudad que es al mismo tiempo cuna del movimiento revolucionario nacional y hogar de la Virgen de la Caridad patrona de la isla.
“Santiago: rebelde ayer, hospitalaria hoy, heroica siempre”, reza la pancarta cerca de la Plaza Antonio Maceo donde el Papa oficiará el lunes la primera de sus dos misas en el país caribeño donde se esperan más de 200.000 personas.
Cuba aguarda con todos los honores al máximo jerarca de la Iglesia Católica, aunque esta vez no será Fidel Castro el encargado de recibirlo, como hizo con Juan Pablo II hace 14 años, sino su hermano menor Raúl, quien lo reemplazó al frente del Gobierno en febrero del 2008.
“Confío en Raúl, Fidel y sigo los pensamientos del Che (Guevara), aunque respeto al Papa y estoy listo para verle”, dijo Roberto, quien pidió no revelar su apellido, bajo el abrasador sol caribeño de Santiago, a unos 900 kilómetros de La Habana.
“Le mostraremos (al Papa) que somos un pueblo solidario, instruido y con dignidad”, agregó el convencido militante comunista.
La impactante visita de Juan Pablo II en 1998 aceleró el proceso de reconciliación entre la Iglesia y el Gobierno cubano tras décadas de roces desde el triunfo de la revolución en 1959, mientras que el viaje de su sucesor apunta a consolidar los vínculos cuando todavía persisten diferencias en temas como el uso de los medios de comunicación y la educación religiosa.
El Papa se entrevistará el martes con Raúl Castro y saldrá de la isla el miércoles. En su visita podría coincidir con el presidente venezolano, Hugo Chávez, quien viajó el sábado a La Habana para iniciar la radioterapia con la que se está tratando un cáncer.
Sin embargo, no está previsto que Benedicto XVI se reúna con ningún grupo de los llamados disidentes en la isla.
Con información de infobae.com y AFP