Una investigación llevada a cabo en el Hospital John Radcliffe en Oxford, Inglaterra, encontró que las melodías tranquilas y las canciones populares pueden tener un efecto calmante en los pacientes sometidos a anestesia local que están despiertos durante la operación.
El estudio, publicado en Annals of the Royal College of Surgeons (Anales del Colegio Real de Cirujanos), siguió el progreso de 96 pacientes internados en el hospital para cirugías menores.
Durante las operaciones, la mitad de los pacientes escucharon música, por ejemplo la transmisión de una estación de radio o una selección de canciones de un CD elegidas por un miembro del equipo quirúrgico.
La otra mitad de pacientes fue sometida al procedimiento bajo las condiciones normales de silencio con las que se realizan estas operaciones. Después de los procedimientos se pidió a los pacientes que calificaran el grado de ansiedad que sintieron durante la operación.
El grupo que escuchó música informó de niveles de ansiedad casi 35% menores que el grupo que fue operado silencio y también señalaron que durante la cirugía tuvieron patrones de respiración más relajados, de casi 11 respiraciones por minuto, comparados con 13 respiraciones por minuto entre el grupo de silencio.
Estos resultados confirman los hallazgos de estudios anteriores que han mostrado quela música contribuye a aliviar el dolor y también puede ser una herramienta valiosa para ayudar a los pacientes con respiración asistida.
Como informa bbc.co.uk los expertos saben que el estrés puede tener un impacto negativo en los resultados de las operaciones quirúrgicas y puede prolongar el proceso de recuperación.
El doctor Hazim Sadideen, cirujano plástico que dirigió el estudio, afirma que ahora será necesario llevar a cabo más estudios para establecer si el uso de música en los quirófanos debe volverse una práctica estándar.
EFE