El lago Titicaca, situado a casi 4.000 metros de altitud en la cordillera andina entre Bolivia y Perú y considerado sagrado por diferentes culturas precolombinas, oculta bajo sus aguas restos de civilizaciones de más de 2.000 años que un revolucionario plan de arqueología subacuática tratará de revelar.
"Es el primer plan de excavación subacuática" en Bolivia, dijo este sábado el investigador belga Christophe Delaere, codirector del proyecto "Huiñaimarca", impulsado por el Ministerio de Culturas de Bolivia y la Universidad Libre de Bruselas (ULB) para investigar numerosos emplazamientos costeros precolombinos, especialmente de la cultura preinca Tihuanaco, que se hallan actualmente bajo el agua.
El proyecto, planificado para tres años y desarrollado conjuntamente por expertos de ambas instituciones, se inició en abril de 2012 con prospecciones geofísicas.
En febrero pasado las primeras inmersiones permitieron localizar e identificar seis yacimientos arqueológicos sumergidos en el lago menor del Titicaca, en Bolivia.
"Encontramos muros domésticos dentro del agua. Vamos a excavar cerca del muro" para conocer su composición y comprender el uso que se daba a la estructura, precisó Delaere, quien indicó que"hay casi 600 kilómetros cuadrados del territorio de la cultura Tihuanaco dentro del agua".
Esos hallazgos de estructuras de habitación y ceremoniales y terrazas agrícolas confirman los modelos de las fluctuaciones históricas del Titicaca efectuadas por la universidad bruselense.
El proyecto, que ha sido consensuado con las autoridades municipales locales y comunidades originarias de la zona, es "el primer intento binacional por realizar una investigación con técnicas y metodología acordes con las necesidades científicas del siglo XXI", dijo el otro codirector de la iniciativa, el investigador boliviano Marcial Medina.
Se prevé que la tercera etapa del proyecto, que será decisiva para el futuro de la investigación, comience entre junio y julio.
A lo largo de esos dos meses, el equipo que dirigen Delaere y Medina pondrá en práctica sofisticadas técnicas de excavaciones arqueológicas subacuáticas, inéditas hasta el momento en el Titicaca, pero que cuentan con sólida trayectoria en Europa, especialmente en los estudios de patrimonio histórico sumergidos en el mar Meriterráneo.
Participará también una veintena de arqueólogos de Bélgica, Bolivia, Perú, España, Francia e Italia, la mayoría de ellos buzos científicos especializados en arqueología subacuática.
Los objetivos se centran en afinar el límite de la orilla del lago para determinar con más precisión, por medio de sondeos y decapado estratigráfico, la forma de vida de las diferentes culturas que habitaron a su alrededor, desde la etapa Formativa a la Colonial pasando por la Tihuanacu y la Inca, que abarcan desde antes del año 500 antes de Cristo hasta el 1825.
EFE