Miles de campesinos comenzaron este lunes concentraciones y marchas en zonas rurales de Colombia, en demanda de auxilios económicos a su actividad y de mayor acceso a la propiedad de la tierra, reportaron las autoridades y los líderes de la protesta.
"Participan entre 150.000 y 200.000 campesinos en todo el país. Hay marchas y taponamientos (bloqueos de vías)", dijo Eberto Díaz, vocero de la Mesa Nacional de Interlocución Agraria, que organiza la protesta.
"También se van a unir camioneros y mineros. Seguramente mañana (martes) se irán sumando más personas", añadió Díaz.
El paro agrario en el que participan productores de papa, arroz, algodón, leche, café y otros rubros se ha declarado como indefinido y sus líderes aspiran a instalar una mesa nacional de diálogo con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos para atender la problemática del campo.
Según un primer reporte del jefe de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, este lunes han sido detenidos dos manifestantes.
"Se han presentado algunas concentraciones y en horas de la madrugada hubo perturbaciones en la vía Ipiales-Pasto en Nariño" (sur, fronterizo con Ecuador), dijo Palomino.
"En el Puente de Boyacá (centro), a las dos de la mañana, hubo intentos de perturbación. Allí se produjeron dos capturas", agregó Palomino.
A la vez, el ministro del Interior Fernando Carrillo hizo un llamado a los manifestantes para que la protesta sea pacífica.
"Creo que lo fundamental es que la gente sepa que si va a salir lo tiene que hacer de manera pacífica. Hay que evitar la infiltración de los violentos. No vamos a aceptar la anarquía", dijo el ministro.
De acuerdo con los organizadores, las concentraciones más importantes ocurren en el sur de Colombia, en los departamentos de Putumayo, Nariño, Cauca, Valle del Cauca y Caquetá.
También hay manifestaciones en Sucre (norte), donde los campesinos marchan hacia la ciudad de Sicelejo, y en Boyacá.
"Vamos midiendo fuerzas. Dependiendo de cuántos campesinos se sumen y en la medida en que el gobierno nos dé respuesta de instalar la mesa de diálogo nacional iremos evaluando la protesta", explicó Díaz.
En tanto, el ministro del Interior anunció que a partir del martes recibirá a grupos de indígenas y algunos campesinos.
"Vamos a demostrar que mientras algunos están en la protesta, nosotros estamos con las vías del diálogo totalmente abiertas", dijo.
El 8 de agosto, la Mesa de interlocución agraria presentó al gobierno un pliego de peticiones que, según Díaz, no ha recibido respuesta y que incluye el establecimiento de precios de sustentación para ciertos productos y la rebaja de los insumos agrícolas.
Además, los pequeños agricultores buscan garantías para el acceso a la propiedad de la tierra, la constitución de zonas de reserva campesinas, una política favorable a los mineros artesanales y mejoras sociales en las zonas agrícolas, especialmente en cuanto a salud y acceso al agua potable.
Las zonas de reserva campesina son una figura legal creada en 1994 que concede cierta autonomía para preservar en algunos territorios la pequeña propiedad de la tierra. Su constitución, también era una de las exigencias de los campesinos que hasta hace un par de semanas protestaban en el Catatumbo (noreste) y que actualmente negocian con el gobierno.
"Participan entre 150.000 y 200.000 campesinos en todo el país. Hay marchas y taponamientos (bloqueos de vías)", dijo Eberto Díaz, vocero de la Mesa Nacional de Interlocución Agraria, que organiza la protesta.
"También se van a unir camioneros y mineros. Seguramente mañana (martes) se irán sumando más personas", añadió Díaz.
El paro agrario en el que participan productores de papa, arroz, algodón, leche, café y otros rubros se ha declarado como indefinido y sus líderes aspiran a instalar una mesa nacional de diálogo con el gobierno del presidente Juan Manuel Santos para atender la problemática del campo.
Según un primer reporte del jefe de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, este lunes han sido detenidos dos manifestantes.
"Se han presentado algunas concentraciones y en horas de la madrugada hubo perturbaciones en la vía Ipiales-Pasto en Nariño" (sur, fronterizo con Ecuador), dijo Palomino.
"En el Puente de Boyacá (centro), a las dos de la mañana, hubo intentos de perturbación. Allí se produjeron dos capturas", agregó Palomino.
A la vez, el ministro del Interior Fernando Carrillo hizo un llamado a los manifestantes para que la protesta sea pacífica.
"Creo que lo fundamental es que la gente sepa que si va a salir lo tiene que hacer de manera pacífica. Hay que evitar la infiltración de los violentos. No vamos a aceptar la anarquía", dijo el ministro.
De acuerdo con los organizadores, las concentraciones más importantes ocurren en el sur de Colombia, en los departamentos de Putumayo, Nariño, Cauca, Valle del Cauca y Caquetá.
También hay manifestaciones en Sucre (norte), donde los campesinos marchan hacia la ciudad de Sicelejo, y en Boyacá.
"Vamos midiendo fuerzas. Dependiendo de cuántos campesinos se sumen y en la medida en que el gobierno nos dé respuesta de instalar la mesa de diálogo nacional iremos evaluando la protesta", explicó Díaz.
En tanto, el ministro del Interior anunció que a partir del martes recibirá a grupos de indígenas y algunos campesinos.
"Vamos a demostrar que mientras algunos están en la protesta, nosotros estamos con las vías del diálogo totalmente abiertas", dijo.
El 8 de agosto, la Mesa de interlocución agraria presentó al gobierno un pliego de peticiones que, según Díaz, no ha recibido respuesta y que incluye el establecimiento de precios de sustentación para ciertos productos y la rebaja de los insumos agrícolas.
Además, los pequeños agricultores buscan garantías para el acceso a la propiedad de la tierra, la constitución de zonas de reserva campesinas, una política favorable a los mineros artesanales y mejoras sociales en las zonas agrícolas, especialmente en cuanto a salud y acceso al agua potable.
Las zonas de reserva campesina son una figura legal creada en 1994 que concede cierta autonomía para preservar en algunos territorios la pequeña propiedad de la tierra. Su constitución, también era una de las exigencias de los campesinos que hasta hace un par de semanas protestaban en el Catatumbo (noreste) y que actualmente negocian con el gobierno.