Danzando, cantando, de rodillas o en bicicleta comenzaron a concentrarse miles de peregrinos en la Basílica de Guadalupe en Ciudad de México, para venerar y cantar a primera hora de mañana las tradicionales "mañanitas" a la Virgen morena por el 482 aniversario de sus apariciones en este lugar.
Roger Zamora, un joven de 23 años, quiere darle gracias a la Virgen por "el trabajo y lo que tengo", sin importarle haber cargado a sus espaldas una imagen de La Guadalupana de más de un metro durante tres días de caminata.
Al igual que Zamora, otros jóvenes llegan en pequeños grupos o en caravanas de diversos rincones del país.
Juan Manuel Daviana, de 21 años, encabeza este año una peregrinación de más de un centenar de personas de todas las edades, que llegó en dos autobuses desde San Juan de Huixtitlán.
"Esta peregrinación se hace desde hace 50 años consecutivamente y ahora nos toca a los jóvenes encabezarla para darle gracias a la Virgen. Las peticiones son de cada uno y eso será personal", dijo Daviana, quien aseguró que la devoción y fervor por La Guadalupana no han cambiado pese a la pérdida de fieles de la Iglesia Católica en los últimos años.
En el caso de Dominga Guzmán Sánchez, una señora de avanzada edad, la motivación es la necesidad de festejar a su "morenita del Tepeyac sin pedir nada", y si bien reconoció que la caminata "ha sido dura" por toda la ciudad, no hay nada ni nadie que hasta el momento le impida asistir.
La Basílica de Guadalupe, uno de los principales santuarios de la Iglesia Católica, espera recibir este año más de seis millones de feligreses de todo el territorio mexicano y algunos países centroamericanos.
Las autoridades capitalinas esperan que en el transcurso de las siguientes horas lleguen feligreses de los centrales estados de México, Hidalgo, Querétaro, Guanajuato, Puebla, Morelos, principalmente, así como de otras entidades incluyendo la propia Ciudad de México.
En el perímetro del santuario fueron instalados dos albergues, uno de ellos en la Estancia del Peregrino, que cuenta con servicio médico, dormitorios, sanitarios, agua potable y comedor.
También existe un operativo especial que desde el día sábado se puso en marcha para recibir a los peregrinos, que involucra casi 19.000 agentes de seguridad de la capital y 8.000 de fuerzas federales, según cifras oficiales.
En el exterior e interior del Templo Mariano comenzaron a instalarse en horas de la madrugada miles de personas, delimitando su espacio con cartones o improvisadas casas de campaña hechas de bolsas de plástico, mientras que otros sólo van de paso a orar o depositar una ofrenda.
Según la tradición católica, la Virgen de Guadalupe se le apareció al indígena Juan Diego en varias ocasiones a lo largo de 1531, la última el 12 de diciembre de ese año, en un lugar próximo al emplazamiento actual de la Basílica, junto al Cerro del Tepeyac. EFE