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martes, 11 de marzo de 2014

A tres meses del Mundial, Río de Janeiro buscará retomar el control de otra favela

AFP).- La policía de Rio de Janeiro ocupará este jueves una favela de la zona oeste, una de las más violentas de la ciudad, donde facciones rivales de narcotraficantes se disputan el mando desde hace un mes, dijo este martes a la AFP una fuente del gobierno estatal.
La ocupación de la favela Vila Kennedy, donde viven cerca de 100.000 personas, será conducida por el Batallón de Operaciones Especiales de la policía, el temido Bope, así como por el Batallón de Choque, que instalarán allí la 38ª Unidad de Policía Pacificadora (UPP) del total de 40 comisarías de este tipo previstas en la ciudad antes del Mundial de fútbol.
La operación tiene lugar en un momento de gran tensión: un jefe del narcotráfico local cambió de facción e intenta tomar el control de Vila Kennedy. Los narcos se enfrentan desde hace un mes, sembrando el pánico entre los habitantes.
Varias UPP han sido blanco de ataques del crimen organizado en las últimas semanas. Un total de 16 policías han muerto en servicio en Rio desde que comenzó el año, tres de ellos en UPP.
El secretario de Seguridad Pública del estado de Rio, José Mariano Beltrame, indicó el domingo que el ejército podría regresar a las favelas “pacificadas” donde resiste el narcotráfico.
El gobierno de Rio lanzó en 2008 una campaña para mejorar la seguridad en vistas de la Copa del Mundo de fútbol, del 12 de junio al 13 de julio, y de los Juegos Olímpicos que la ciudad acogerá en 2016.
Las autoridades “reconquistaron” varias favelas que estuvieron durante décadas en manos de narcotraficantes o milicianos, e implantaron en las barriadas estas comisarías llamadas UPP.
Con Vila Kennedy, un total de 38 UPP con más de 9.000 policías vigilarán 253 favelas, beneficiando a una población de más de 1,5 millones de personas, según las autoridades.
En seis años, los homicidios han caído 65% en las favelas “pacificadas” y 48% en toda la ciudad. Pero hubo también denuncias de violencia de parte de la policía con respecto a los habitantes: varios policías que trabajaban en la UPP de Rocinha están presos, acusados de asesinar el año pasado a un habitante de la favela, Amarildo de Souza, que aún se halla desaparecido.