El español Fernando Ortiz, que inventó en el 2000 un aerosol que permitía realizar en el campo de fútbol una marca temporal para que los árbitros señalaran el lugar exacto donde poner el balón y las barreras en las faltas, denunciará a la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) por plagio.
Ortiz ha anunciado a Efe que él, que se denomina un estudioso del fútbol, creó este aerosol con "pintura de inmediata desaparición" porque desde hace tiempo venía observando las disputas originadas por la falta de precisión desde dónde se tenía que tirar el balón y que las barreras no se moviesen cuando se cometía alguna falta en el terreno de juego.
Convencido de que su invento podía ser de gran uso, envió a la FIFA una carta con un vídeo explicativo, después de patentar y registrar el artículo, invitando a que la federación pudiese comprar sus derechos o llegar a un acuerdo con él.
Meses después, Ortiz recibió una carta de la FIFA en la que lamentaban "la falta de realismo y visibilidad" de dicho aerosol y que una medida de estas características no sería "viable" porque "en pocos minutos el césped estaría completamente recubierto de marcas coloreadas, por lo que sería imposible discernir el punto exacto", según consta en la documentación facilitada por el inventor.
"Sorpresivamente y hurtando los derechos" Ortiz tuvo conocimiento de que la FIFA pretende usar este aerosol en la próxima Copa del Mundo de Brasil, tal y como avanzó Joseph Blatter, presidente de la federación, durante el Mundial de Clubes el pasado diciembre, y por lo que el inventor ha pedido a través de una carta enviada por su abogado "el retiro de dicha publicidad".
"Si la FIFA no actúa y lo retira, lo reclamaríamos por vía judicial y les demandaríamos porque es algo que está patentado y no me voy a quedar con los brazos cruzados", ha asegurado Ortiz a Efe.
Nunca se respeta en las barreras la distancia que dice el reglamento de 9,15 metros cuando se comete una falta, y "los jugadores se adelantan o mueven el balón", ha detallado.
Le costó inventarlo "bastante" porque era totalmente desconocido, pero ha indicado que contó con una empresa de Barcelona que estudió el tema y le mandaron las muestras que posteriormente él mandó a la FIFA con un vídeo explicativo y que ésta rechazó.
"O se negocia esto o vamos a juicio", ha reiterado varias veces Ortiz, que ha asegurado que se siente "decepcionado y enfadado" porque la FIFA "se quiere apropiar de algo que no es suyo, y eso no es justo".EFE