Gerard Piqué no entiende la situación por la que está atravesando. Tras la derrota en el Santiago Bernabéu frente al Real Madrid, Luis Enrique no ha vuelto a contar con él -salvo para el encuentro de la Supercopa Catalana ante el Espanyol, con un Barça repleto de suplentes y un rival igual-. El técnico azulgrana lo dejó en la grada frente al Celta de Vigo en el Camp Nou y el pasado miércoles lo sentó en el Amsterdam Arena.
En consecuencia, de los últimos 180 minutos, Gerard no ha jugado ni uno. Ni siquiera la lesión de Jeremy Mathieu -que cayó frente al Celta en el sóleo- propició que Piqué recuperara el protagonismo en el eje de la zaga en el Amsterdam Arena.
Pese a que acata la decisión de Luis Enrique de dejarlo fuera del once, la situación tiene completamente desconcertado a Piqué, pues considera que entrena bien y que vuelve a estar a un gran nivel una vez superadas por completo las molestias que arrastraba de la cadera del final de la temporada pasada.
Luis Enrique habló con él
Pese a que no tiene por norma dar explicaciones a un jugador que deja fuera del once, el pasado viernes Luis Enrique charló con Piqué. El entrenador azulgrana le dejó claro que su decisión es únicamente por motivos técnicos y que detrás no esconde ningún castigo por alguna actitud que haya podido tener. "Es una decisión técnica y las cuestiones del vestuario se quedan allí", comentó el entrenador tras dejar a Piqué en la grada, justo después de que salieran unas imágenes en las que se veía al jugador leyendo, supuestamente, el teléfono desde en banquillo en el partido de la Supercopa catalana ante el Espanyol.
Piqué no piensa rendirse
Aclaradas las posturas, y descartado que el entrenador le esté dejando fuera del equipo por cuestiones extradeportivas, Piqué tiene entre ceja y ceja trabajar duro para cambiar la opinión que el entrenador tiene ahora de él. Quienes les conocen bien admiten que Piqué es de los que se crece ante la adversidad, que en su ADN tiene el gen de la competitividad y que no va a arrojar la toalla.
Pese a que encima de la mesa tiene ofertas -los grandes de la Premier están tras sus pasos-, Piqué se siente culé por los cuatro costados y, a día de hoy, en su cabeza no tiene otra idea que la de volver a ser un jugador importante en el Barça y conquistar más títulos como blaugrana.
MD