Pasado el 9-N, el Gobierno catalán se propone seguir adelante con el proceso soberanista haciendo campaña en varios frentes. La estrategia del Ejecutivo de Artur Mas, que mañana concretará los pasos a seguir en los próximos días, pasará por intentar una negociación con el Gobierno español y convencer al mundo de la necesidad de un referéndum en Cataluña. "Hay una batalla por ganar, que es la de la batalla internacional, la de los Estados", ha dicho esta mañana el portavoz del Gobierno catalán y consejero de Presidencia, Francesc Homs, que ha hecho ronda por varios medios de comunicación.
Esa voluntad la evidenciará hoy el Gobierno catalán con la carta que Mas enviará a Mariano Rajoy, en la que le pedirá un referéndum legal y vinculante. Homs no ha querido dar detalles del contenido de la misiva, pero sí ha avisado de que si la respuesta del Gobierno es continuar negando la consulta, el Ejecutivo seguirá adelante con el proceso soberanista. "Tener una actitud dialogante no quiere decir que dejemos de hacer lo que tenemos que hacer". Si el Ejecutivo sigue cerrado en banda, Mas se reserva la opción de convocar unas elecciones anticipadas que sirvan como plebiscito de la independencia: "Hay esa posibilidad, si no hay forma de hacer un referéndum acordado". Pese a que el Ejecutivo catalán se jactó de la presencia de observadores internacionales en la consulta del domingo, Homs considera que los apoyos de Cataluña son escasos, pero pueden crecer: "Evidentemente, esto se puede ganar y se gana a base de tener determinadas actitudes, como la voluntad negociadora, el civismo y el diálogo".
Homs ha sido muy crítico con Rajoy y su Gobierno: "Es una vergüenza que dijese que esto de Cataluña no es un referéndum ni una consulta. No podemos dejar que sigan con esta manera de actuar, con esta actitud tan hostil y tan antidemocrática". La Generalitat ampliará el recurso que envió al Tribunal Constitucional por la suspensión de la consulta alternativa con la frase de Rajoy en la que quita toda validez a la votación de ayer. En la lista de quejas, Homs también ha añadido que el sábado el Gobierno filtrara la decisión de la fiscalía de investigar el 9-N antes de que lo comunicara formalmente el ministerio fiscal: "Fue muy grave. Han utilizado las instituciones de poder en beneficio propio".
El consejero de Presidencia se ha mostrado muy satisfecho con la votación de ayer, por la participación (2,25 millones de catalanes) y porque hubo votantes no independentistas. El 20% de los que se sumaron al 9-N optaron por el sí-no, el no a la secesión, u otras opciones que no fueran el sí a la doble pregunta de la consulta. Con estas cifras, Homs ha apostillado: "No fue una votación como las de Corea del Norte".
14.000 votantes en el exterior
Cerca de 14.000 catalanes han votado este domingo en todo el mundo, donde la Generalitat había habilitado urnas en sus locales de promoción económica. Londres, donde los que quisieron participar tuvieron que hacer colas de hasta cinco horas, lidera la participación con 2.942 personas, según ha explicado el consejero de Presidencia, Francesc Homs.
La segunda con más votos fue Andorra, con 2.489, seguida de Bruselas (1271), Nueva York (1091), Berlín (1071), México (636) y Sidney (297). La ciudad australiana, además, fue la primera en la que se votó en la consulta. Estas cifras todavía no están sumadas al cómputo global de participación, 2,23 millones con más del 90% escrutado. Miles de catalanes hicieron ayer largas colas antes ante las delegaciones de la Generalitat en distintas ciudades del extranjero para formar del "proceso participativo" sobre la independencia.
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