Buena parte del negocio de las filiales españolas de las grandes tecnológicas estadounidenses escapó al fisco otro ejercicio más. Las complejas estrategias societarias diseñadas por sus ejércitos de asesores y las grietas en el muro de la fiscalidad internacional les permiten encoger legalmente su tributación. Los ocho gigantes (Apple, Yahoo, Amazon, Twitter, Microsoft, Ebay, Google y Facebook), pagaron en 2013 a la Agencia Tributaria solo por una pequeña porción de las ganancias generadas en España. El resto resulta imposible de calcular por la opacidad con que operan estos grupos.
Estas firmas operan mayoritariamente como intermediarias de otras delegaciones en Irlanda, Holanda, Suiza o Luxemburgo, países con una tributación reducida o unas leyes que les permiten traslar sus beneficios sin apenas coste impositivo. Las filiales españolas de los gigantes del sector abonaron 17.471.339 euros en impuestos por sus beneficios en 2013.
Si se excluye a Microsoft —la que más paga aunque todavía lejos de lo que debería si no trasladara legalmente a Irlanda parte del negocio que genera en España— el resto de las sucursales de las multinacionales tecnológicas en España liquidan de media cerca de un millón de euros por el impuesto de sociedades pese a facturar miles de millones.
Las oficinas españolas de estas corporaciones estadounidenses reflejaron en sus estados contables unos ingresos de 641,6 millones y unos beneficios antes de impuestos de 46,3 millones, cifras muy alejadas del valor que realmente han generado en España por la venta de sus productos de última generación o sus punteros servicios tecnológicos.
A diferencia de otros años, estas multinacionales apenas han generado créditos fiscales por pérdidas —impuestos que se compensan en el futuro— que tanto Apple como Amazon registraron en 2012 y sirven para rebajar su factura fiscal en los próximos años.
Las cifras analizadas por EL PAÍS proceden de las cuentas anuales del ejercicio fiscal de 2013 de 11 compañías (algunas tienen varias filiales) de estas ocho corporaciones depositadas en el Registro Mercantil. Las últimas en registrarse fueron la de Yahoo Iberia, la semana pasada.
APPLE / El doble juego
La compañía de la manzana es el paradigma de la elusión fiscal. Steve Jobs fue un visionario que ha pasado a la historia por imaginar aparatos revolucionarios pero también por idear en 1980 una estrategia fiscal pionera en explotar las ventajas que proporcionaba el régimen irlandés a sociedades no residentes, según detalla Mercedes Serraller en su libro ¿Por qué pagas más impuestos que Apple? En España, la multinacional con sede en Cupertino tiene dos filiales: Apple Retail Spain —que gestiona la red de tiendas del grupo, las Apple Store— y Apple Marketing, que actúa como comisionista y “soporte de ventas y proveedor de los servicios de marketing y recibe una comisión del 1% por las ventas obtenidas para el grupo”, según figuraba en las cuentas de 2010, información que no volvió a actualizarse.
La actividad de Apple Retail, que depende de otra sucursal radicada en Irlanda, está marcada por la entrada a pleno rendimiento de seis nuevos establecimientos abiertos en 2012 y las obras de la gran tienda en la plaza de Sol en Madrid. La sociedad ha facturado un 49% más hasta elevar sus ingresos a 213 millones por la venta de sus tabletas, teléfonos y ordenadores. La mayor parte del beneficio se deriva a la delegación irlandesa, pues está vende a la española los productos a un precio alto para que el margen de beneficios se quede en Dublín. Por eso, pese al éxito de ventas, la sociedad solo logró un beneficio de 2,1 millones (después de impuestos) en el ejercicio cerrado el 30 de septiembre de 2013. La sociedad rebajó su tributación al compensar 1,2 millones por bases imponibles negativas —pérdidas fiscales de un año que sirven para reducir beneficios futuros— generadas en su mayor parte en 2012. La compañía acumula unos créditos fiscales por 22,1 millones.EL PAIS