Del amor al odio hay solo un paso. Y ese paso precisamente es el que parece haber dado Tom Cruise y Katie Holmes, que no se dirigen la palabra ni para tratar los asuntos de su hija en común, Suri (8), fruto del matrimonio que les unió cinco años y que terminó en 2012. Cualquier cosa relacionada con la pequeña la solventan a través de intermediarios.
Así, fuentes cercanas a la pareja han contado al portal TMZ que existe cierto “malestar” entre ambos, y que ni Tom ni Katie están interesados en arreglar sus diferencias.
Por lo que parece, la actriz no está contenta con lo poco que está participando Tom en la vida de su hija, de hecho no la ha visto en meses, al haber estado trabajando en Londres.
Sin embargo, personas cercanas al actor han asegurado que Tom sí está pendiente de la niña, y ahora que ya ha concluido el rodaje de Misión Imposible 5 volverá a Los Ángeles, donde podrá verla de nuevo.
En este tiempo Katie podría haber comenzado un romance con el actor Jamie Foxx, lo que no ha llenado precisamente de tranquilidad a Tom, quien ya en el pasado ha expresado su temor a la “mala influencia” que estas relaciones pudieran tener en Suri.
“Este no es un romance intenso. Jamie y Katie son amigos y lo han sido por mucho tiempo. Son dos adultos que son atractivos y están solteros, así que lo que pase ya se verá. Pero no van a acelerar las cosas ni a buscar un compromiso serio”, contaba un informante a la revista People
AFP
