La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, decretó este miércoles el estado de excepción por catástrofe en la provincia de Llanquihue y en el municipio de Puerto Octay, tras hacer erupción este miércoles el volcán Calbuco, situado a 1.000 kilómetros al sur de Santiago.
Esta decisión supone que las Fuerzas Armadas y de Orden se despliegan en terreno y toman el control de la situación, además de colaborar en las labores de evacuación de las personas que habitan en un área de 20 kilómetros alrededor del macizo montañoso, considerada como “zona de exclusión inmediata”.
En esta línea, la subsecretaría del Interior determinó el toque de queda desde las 23.45 horas del miércoles y las 5.00 horas del jueves (entre 3.45 y 13.30 GMT del jueves) en las comunas de Puerto Montt, Puerto Varas y Puerto Octay.
La medida se tomó con el fin de evitar robos en las cientos de casas que quedaron sin sus moradores al decretarse la evacuación o saqueos en los supermercados o estaciones de gasolina. También las autoridades regionales determinaron la suspensión de las clases hasta nuevo aviso.
La inesperada erupción del Calbuco, 43 años después de la última vez, supone una “alta amenaza para la población”, motivo por el cual las autoridades han decretado la alerta roja en las localidades de Puerto Varas y Puerto Montt.
Más de 4.000 personas ya han sido evacuadas de los pueblos de Ensenada, Alerce, Colonia Río Sur y Correntoso, en la región de Los Lagos, según el Ministerio del Interior, si bien en la zona afectada viven más de 60.000 pobladores.
“Hacemos un llamado a todas las personas que vivan o en estos momentos se encuentren en la zona cercana al volcánCalbuco evacúen y tomen todas las medidas preventivas para resguardar su seguridad”, dijo este miércoles el titular de Interior, Rodrigo Peñailillo.EFE