El Secretario General de la ONU condenó enérgicamente las violaciones de derechos humanos cometidas durante la escalada de violencia de los últimos días en Sudán del Sur entre el Ejército Popular de Liberación de Sudán (SPLA) y sus facciones opositoras y fuerzas aliadas en los estados de Unidad y Nilo Alto.
En un comunicado, Ban Ki-moon expresó consternación por los abusos de todas las partes, que incluyen el incendio de aldeas y el asesinato y violación de civiles, y exigió que se investiguen inmediatamente los crímenes y se juzgue a los responsables en tribunales nacionales.
Ban también deploró la muerte de cuatro desplazados atrapados en un fuego cruzado cuando se encontraban en un centro de protección de civiles de las instalaciones de la Misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS) en la localidad de Melut.
Ban Ki-moon llamó al presidente Salva Kiir y al ex vicepresidente Riek Machar a cesar de inmediato todas las operaciones militares.
Finalmente, reiteró que las partes deben respetar la inviolabilidad de los recintos de la UNMISS, que acogen actualmente a más de 120.000 desplazados.